Por Daniel Spinelli
El Papa Francisco nombró en la jornada de ayer como nuevo Obispo de Salto, a Mons. Arturo Eduardo Fajardo Bustamante. Mons. Fajardo tiene 58 años de edad y desde 2007 es Obispo de la Diócesis de San José de Mayo. Actualmente es Presidente de la Conferencia Episcopal del Uruguay (CEU) y de la Comisión Nacional de Ecumenismo y Diálogo Interreligioso de la CEU.
El obispo designado para la Diócesis de Salto es oriundo de Aiguá (Maldonado) y fue ordenado sacerdote por San Juan Pablo II el 8 de mayo de 1988, en la ciudad de Florida. En entrevista con CAMBIO dijo que su premisa será continuar la huella que dejaron sus antecesores, como Marcelo Mendiharat, Daniel Gil, Pablo Galimberti, Fernando Gil y es adminsitrador diocesano Carlos Silva.
SU APOSTOLADO
En sus primeros años de sacerdocio, Mons. Fajardo desempeñó diversos servicios pastorales en la entonces Diócesis de Minas , entre ellos Vicario Cooperador en la Catedral de Minas, y Párroco en las Parroquias San José de Minas, y San Carlos Borromeo de José Pedro Varela (Lavalleja).
En el año 1998 la CEU lo nombró Director Espiritual del Seminario Mayor Interdiocesano Cristo Rey, del que luego fue formador y, de 2005 a 2007, Rector. El obispo electo ha prestado diversos servicios en la CEU: fue Vicepresidente por dos períodos (2013-2015 y 2016-2018) y entre 2013-2015 presidió la Comisión Nacional de Pastoral Juvenil. Actualmente es Presidente del episcopado uruguayo y, desde 2016, de la Comisión Nacional de Ecumenismo y Diálogo Interreligioso.
Mons. Fajardo será el séptimo Obispo de la Diócesis de Salto, cuya sede se encontraba vacante desde el fallecimiento de su anterior Pastor, Mons. Fernando Gil, acaecido el 17 de enero de 2020.
“ME HICE CURA PARA SERVIR Y ESA ES MI MAYOR MISIÓN”
En la tarde de ayer, CAMBIO ase comunicó con el ya designado nuevo Pastor de la Diócesis de Salto -que abarca los departamentos de Artigas, Salto, Paysandú y Río Negro-, quién se mostró feliz y en paz por la nueva designación. Contó que en realidad desde el martes pasado que tiene conocimiento de la designación papal, pero estuvo unos días pensándolo, hasta que finalmente aceptó la misión. Fajardo dijo que el nombramiento lo tomó por sorpresa y no lo esperaba, ya que hace años es Obispo de San José, lugar donde se siente “muy bien”. Pero expresó, “yo no me hice cura para estar bien, sino para servir y esa es mi principal misión”. Ante la consulta de lo que conoce de la diócesis de Salto, Fajardo dijo que “no conozco nada”, agregando que será un desafío y una alegría asumir en Salto y poder conocer la amplitud del territorio de la diócesis.
“MI PRIMERA ACCIÓN SERÁ RECORRER PARROQUIA POR PARROQUIA”
Fajardo dijo que no hay una fecha concreta de su asunción como Obispo de Salto, pero personalmente le gustaría asumir el 15 de agosto, Fiesta Mariana. Dijo que luego de la designación deben pasar dos meses para asumir por eso estima que agosto será el momento elegido para hacerse cargo de las responsabilidades que ameritan en la Diócesis de Salto. Su acción principal será recorrer parroquia por parroquia, comunidad por comunidad, para conocer y darse a conocer, siendo “una oveja en medio de su rebaño”.
