Pantalla Uruguay logró concretar su primera jornada del remate 220, con un alto nivel de colocación y una vaca de invernada convertida en la vedette de los negocios.
La jornada comenzó con la colocación de los ovinos, donde el escritorio Otto Fernández de Artigas colocó un lote de 2.000 piezas de cría merino que cotizaron a US$ 51, donde si «se da el cordero por muerto, se vendió la oveja a 102 dólares» dijo el Ing. José Aicardi, principal de la firma Megaagro, integrnante del consorcio de rematadores.
Luego se remató a buen ritmo la fila de terneros, según el consignatario, aunque cosideró que fue “un poco más lento” para aquellos ejemplares más pesados, que cruzaron los 220 kilos. “Es común que en esta época los terneros pesados estén más trancados y eso explica el promedio de US$ 2,04”, dijo.
En lo que refiere a los novillos de uno a dos años, comentó que hubo buena dinámica y que se colocó prácticamente todo con algún ajuste de valor. “En los novillos más pesados se enlenteció más. El ganado gordo está más atorado en esa categoría y eso repercute en la fluidez de colocación”, aseguró.
También contó que la firma Megaagro colocó 120 novillos de dos a tres años de 300 kilos a US$ 1,79 que fue el precio máximo para esta categoría.
“Es decir, el ganado bueno y reconocido sigue teniendo una diferencia de precio en cualquier categoría”, aseguró.
Las ventas continúan desde la hora 9 de este jueves, con el apoyo financiero del banco Itaú y la certificación de Estudio 3000, con la fila de vientres arrancando con las terneras.
