Los juveniles de Salto han llegado hasta las puertas del objetivo y ante Paysandú buscarán cerrar la temporada con el mayor éxito. El grupo llega en el mejor momento, sumando victorias de local y visitante, sin recibir goles y mantiene el invicto en todo el campeonato, el cual se inició en enero.
Está todo el plantel a la orden, ya que no hay futbolistas lesionados y cumplieron pena Tomás Medina y Mateo Ferrer. Con estos dos jugadores están todos y se podría pensar que el técnico Wilson Cardozo realice cambios, pero también es cierto que modificar lo que está funcionando bien es correr algún riesgo, o más bien desaprovechar alguna ventaja.
Lo principal es que el equipo está en buen camino y en la práctica de ayer volvió a mostrarse sólido como equipo y con buen juego colectivo. El lunes hubo un trabajo regenerativo (el domingo los que no habían jugado el sábado estuvieron en sus clubes), el martes hubo descanso y ayer fútbol exigente con la selección mayor. Hoy se repasará facetas tácticas y mañana habrá trabajos de activación, básicamente.
El sábado el plantel almorzará junto y a las 12.30 horas está previsto partir hacia Paysandú, para el partido que comenzará a las 16.00 horas.
«CON MADUREZ»
El director técnico Wilson Cardozo se refirió al último partido, 1-0 sobre San José: «jugamos tranquilos, por la ventaja que teníamos, se manejó con madurez y mantuvo al rival lejos de nuestro arco. La verdad que fue un buen partido, con dominio en todas las líneas».
Sobre el equipo: «la idea es mantenerlo, pero no se puede confirmar ya, y van a jugar los que estén en un cien por ciento físicamente; eso es lo más seguro. ¿Paysandú? Es un buen equipo, tuvimos cuatro partidos muy parejos, nos ganó la semifinal allá 3-2 en la hora».
