viernes 19 de abril, 2024
  • 8 am

Inmigrantes que llegaron a Salto para trabajar en los arándanos están en situación de vulnerabilidad

Por Karina De Mattos.
Un grupo de inmigrantes se encuentra en el departamento trabajando en la zafra de arándanos. Llegaron aquí engañados, se encontraban en la zona metropolitana y trabajando en diferentes zafras, precisando trabajo fueron captados por oportunistas en la misma búsqueda que los llevó a salir de sus países en anhelo de un mejor futuro. En el trayecto de esta prospección han soportado grandes abusos y discriminación, en este sentido Salto ha sido un oasis para ellos. Son 15 personas que al momento y gracias a la solidaridad de vecinos del barrio “40 Viviendas” tienen un lugar donde dormir y un plato de comida.
Pero necesitan de la ayuda de toda la sociedad para poder llevar una vida digna, algunos desean volver a su país, otros permanecer en nuestro territorio pero conseguir un trabajo mejor. En su mayoría se trata de personas con formación y la zafra del arandano además de que no les brinda seguridad economica es corta.
En diálogo con CAMBIO algunos de ellos contaron su dura historia en primera persona.
“HACE UN AÑO SALÍ DE MI PAÍS”
Kleider Cutiño Estrada tiene 26 años, es de Cuba. “Salí de mi país hace un año y dos meses por el tema de prosperar, salí buscando mejor vida porque hay poco trabajo allí y necesitaba como sostenerme. Saqué un boleto de avión a Guyana y de allí crucé por Brasil hasta Uruguay. Lo único que conocía de este país lo había visto en internet. Al llegar me hice la cédula de identidad y comencé a buscar trabajo en Montevideo y Canelones. No encontré, solo he hecho changas. Conocí a una persona que trabajaba para una AFAP, él nos juntó a todos y nos dijo que acá en Salto había trabajo, como estábamos necesitados vinimos hacia acá. Hoy gracias a una familia muy buena que nos ayudó y a la que le debemos todo, estamos acá y podemos salir adelante. Precisamos casa, un lugar donde poder estar y trabajo”.
“SUFRÍ BURLAS Y MALOS TRATOS POR SER INMIGRANTE”
Yaima Paret y Daniel Álvarez, son una pareja de cubanos que están en Uruguay hace un año, contó su periplo: “Salimos de Cuba por la economía, los dos teníamos trabajo, pero el salario era muy bajo, yo trabajaba en la agricultura y él era informático. Cuando analizamos salir de nuestro país elegimos Uruguay porque es agropecuario, hay pocos ciclones y era un buen lugar. Yo he trabajado en residenciales, él ha tenido menos posibilidades. Pero acá hay centros de trabajo donde no se me ha tratado bien, me han tratado como inmigrante, con burlas, maltrato, no me dejaban trabajar normalmente, me ponían a hacer labores que no tenían que ver con el cuidado, no me dejaban cumplir con mi trabajo.
Muchos residenciales no me han hecho el contrato y siempre me dicen que después y nunca lo terminan haciendo. En muchos llegué y no tenían las condiciones para los adultos mayores y terminé yéndome por miedo a que se lastimara algún abuelo. Nosotros estábamos en Barros Blancos en el departamento de Canelones y llegamos a Salto por un señor de la AFAP y nos dijo que mientras íbamos a trabajar él iba a buscar un lugar de residencia para nosotros, pero se fue. Acá una familia nos ha brindado un lugar y nos trataron super bien, yo por lo menos me he sentido como en casa, como un hogar más”
Daniel Álvarez su pareja agregó: “En Montevideo hay muchas personas trabajando en la AFAP, nosotros no sabíamos muy bien para que nos servía, verdaderamente no sabía lo que era la AFAP. Ahora estamos trabajando en los arándanos, un trabajo que nunca había desempeñado pero estamos llevándola bien, estamos trabajando y estamos en caja, eso es lo importante. Asimismo aunque la cosecha termine pronto, no sabemos qué rumbo vamos a tomar, yo tengo varios títulos, he entregado en Montevideo muchos currículums pero no me han llamado y tengo estudios académicos. Tengo solamente la cédula uruguaya, la visa está atrasada por el covid-19”. Para comunicarse con ellos: 095545396.
“PASÉ UN MES COMIENDO ARROZ Y MANZANAS”
Yuniesqui Guerra Martínez, cubano: “Llegue a Uruguay desde el 6 de febrero del 2019. Todos somos inmigrantes y no quisiera que mis compañeros hoy pasaran lo que he pasado yo.
Me han pasado accidentes en el trabajo en los que por supuesto no estaba en caja. Hay muchos hombres que se aprovechan de las situaciones de nosotros los inmigrantes. Me pasé un mes comiendo arroz con manzanas, durmiendo en una casa que le faltaba la mitad del techo, bañándome con agua fría en pleno invierno, sembrando frutilla sin tomar agua. Se aprovechan de estas situaciones, yo pido que a nosotros como seres humanos no nos hagan estas cosas.
Gracias a esta familia solidaria la estamos pasando bastante bien porque sino en definitiva no tendríamos donde vivir. Hoy dormimos en el colchón en el piso pero los primeros días dormimos en el piso. Somos seres humanos y lo primero que uno desea tener para sostenerse en la vida es trabajo. Todos los días pedimos a dios que venga algo después del arándano. Le pediría a la sociedad uruguaya que piensen un poco en cuantos kilómetros nos separan de nuestro país, somos seres humanos que tenemos familia y somos humildemente personas y yo le pido a Dios por ellos para que algún día no les toque tener que irse a otro país porque es muy difícil esto”.
“ESTAMOS JUNTANDO PARA VOLVER”
Víctor Manuel Martínez y Joanie Féliz Flores son una pareja de República Dominicana, tienen 30 años y dejaron en su país dos hijas pequeñas. “Estamos acá hace un año y tres meses, la esposa mía ha trabajado en una empresa durante 13 meses seis horas. Hemos buscado la forma de volver a nuestro país porque tenemos tiempo luchando y no hemos podido lograr nada. Y para estar acá en esta situación mejor uno está en su casa al lado de sus hijos.
Tenemos alrededor de ocho meses juntando para el pasaje de vuelta, gotica a gotica, y ya completamos para un pasaje, ahora falta uno y luchamos día a día para completarlo y poder irnos porque ya prácticamente todo se ha agotado. Por suerte nos hemos cruzado con buenos samaritanos que nos han tendido la mano. En la vida es así, hay que caminar para aprender y esto es lo que yo me llevo de acá. Aunque me toque irme con las manos vacías le agradezco a dios haber conocido personas buenas, y me voy con conocimiento”.
PARA CONTACTARLOS
Para comunicarse con ellos: 096273694 o 097567160.
Wiliiam Flores, peruano: “Estoy juntando dinero para irme a mi país, tengo a mi esposa en Montevideo, prácticamente no está haciendo nada y tengo que enviarle de acá algunas cosas. Y si alguien nos puede apoyar para juntar el dinero para regresar a Perú pueden comunicarse al 094301715. Para acercarse al lugar dónde están residiendo estas personas por el momento en Barrio Cuarenta Vivienda en calle Juan Carlos Gómez, entre calle 1 y calle 2.