Por Andrés Torterola.
El Instituto Nacional de Donación y Trasplante de células, tejidos y órganos cumplió más de 40 años, se trata de un emprendimiento conjunto de la Universidad de la República con el Ministerio de Salud Pública, funciona en el cuarto piso del Hospital de Clínicas y es el responsable a nivel nacional de las políticas de donación y trasplante.
REGISTRO
En diálogo con CAMBIO la directora de la institución Dra. Milka Bengochea dijo que el instituto no hace los trasplantes, pero se encarga de todo lo referente a la donación, procuración de los donantes, la organización de las listas de espera, la asignación de los órganos y tejidos y el estudio inmunogenético de los donantes y de los receptores para poder hacer los trasplantes. El instituto tiene un registro, que se llama Registro Nacional de Donantes, allí se mantienen todas las expresiones de voluntad, en el año 2013 se modifica la ley, a partir de ahí la norma jurídica indica que todos somos donantes salvo en aquellos casos que en vida hubiera una manifestación de negación a ser donante, el registro lo que mantiene y custodia son las expresiones de no donación, ese sector del instituto que es el registro, funciona las 24 horas, los 365 días del año. Bengochea dijo que cuando se produce el fallecimiento de una persona en cualquier lugar de la república en una institución de salud, ésta tiene la obligación de comunicar el fallecimiento, allí el registro se va a fijar si la persona tiene una expresión negativa, si es así no se produce la donación de órganos, si no tuviera expresión o si fuera positiva, comienza a realizarse un procedimiento por el cual se comunica al médico del instituto encargado de la procuración que existe un fallecido en determinada institución.
LA PANDEMIA NO AFECTÓ LOS TRASPLANTES
Al ser consultada sobre de qué manera afectó la pandemia a la institución y principalmente a la donación, la Dra. Bengochea señaló esperaban que las cifras fueran bastante más bajas que las del año 2019, porque en países pioneros en trasplantes como España el impacto de la pandemia fue muy fuerte, en Uruguay luego de decretarse la emergencia sanitaria, hubo un período de bastante inactividad en materia de donación y trasplante, sobre todo porque el mundo quedó sin respuestas, las primeras preguntas eran si el virus se podía trasmitir a través de un órgano, injerto o tejido, eso no se sabía en el mundo, además había temor de ingresar a un paciente para realizarle un trasplante, por ese motivo se paralizó la actividad de donación. En ese primer período se hicieron trasplantes hepáticos de emergencia porque había pacientes que estaban muy graves y si no se trasplantaban corrían riesgo de fallecer.
BUENA COMUNICACIÓN CON SALTO
En cuanto a la comunicación, el instituto tiene vínculos con todos los hospitales que tienen CTI, hace dos años se generó una red nacional de donación y trasplante y se convocaron a las instituciones privadas como las públicas y éstos designaron a un referente, existen en el Departamento de Salto referentes en este sentido. Bengochea dijo que el director Dr. Raúl Mizrahi ha venido a la ciudad de Salto a brindar charlas informativas sobre todo porque está el sector universitario. El año pasado se pudo controlar bastante bien la pandemia y se logró seguir haciendo trasplantes, pero no existe tranquilidad porque en un escenario donde esto se complique y no haya circuitos libres de covid, y los equipos de trasplantes estén todos hisopados o en cuarentena, desde el punto de vista logístico, complica las posibilidades, se podrán seguir haciendo en la medida que las condiciones puedan ser controladas.
