Colaboración de Cary De los Santos
En la primavera de 1957, los Arquitectos Francisco Lucas Caffre y César Rodríguez Musmano en representación del Municipio Salteño, viajaron a las “Termas de Iraí” de Porto Alegre (Brasil), para cumplir la misión que les fuera confiada, en recoger toda la información sobre el complejo termal brasilero, para luego poder aplicar algunas ideas en el proyecto a efectuarse en las Termas del Arapey. Al difundirse la idea varias instituciones quisieron colaborar en el mencionado proyecto, brindando su opinión e inclusive la colaboración desinteresada, para que las obras anunciadas llegaran a su concreción definitiva lo antes posible. El día 28 de noviembre de 1957, el Sr. Presidente del Concejo – Don Juan H. Paiva, en el oficio Nº 2771, en contestación al Sr. Presidente del Club Remeros Salto – Arq. Daniel J. Armstrong, decía: “…Tengo el agrado de acusar recibo a su atenta nota en la que se ofrecen interesantes sugerencias para el estudio de urbanización del predio donde se encuentra la Fuente Termal del Arapey. Al agradecer los amables conceptos vertidos por la prestigiosa entidad de su digna Presidencia, y la colaboración ofrecida, cúmpleme informarle que se ha dado la correspondiente intervención al Comité Pro Habilitación de las Termas del Arapey…”
OBSTÁCULOS EN LAS GESTIONES
En 1957 el Dr. Huascar Parallada, Presidente de la Comisión de Legislación y Administración de la Cámara de Representantes, eleva el oficio Nº 128 al Concejo Departamental de Salto, donde se adjuntaba la copia del “Proyecto de Ley” por el que se establecían normas para la formación de un Centro Turístico y Estación Termal en la zona del Río Arapey en el Departamento de Salto. “Este Concejo Departamental, luego de tomar conocimiento del referido proyecto, de que son autores los señores Representantes Delfos Roche, Ulises Pereira Reverbel y Renán Rodríguez, resolvió hacerle llegar su opinión ampliamente favorable, y la esperanza de que la interesante iniciativa merezca la aprobación legislativa, con lo que habrá de resolverse en forma definitiva las dificultades que durante tantos años, han obstado al aprovechamiento de la surgente del Arapey.” El proyecto no prosperó y las iniciativas y los esfuerzos anteriores fueron inútiles. El gran obstáculo era que el predio se encontraba en jurisdicción militar y el «Ministro de Defensa Nacional» se oponía a desprenderse de la parcela comprendida en la «Fuente Termal del Río Arapey», por su ubicación estratégica y la importancia para el ámbito castrense. Por el camino quedaron las gestiones del Presidente Tomás Berreta, cuando envió al Parlamento una nota firmada por Don Orestes Lanza – Ministro de Obras Públicas. Posteriormente el Arquitecto Armando I. Barbieri – Intendente Municipal de Salto intentó realizar acuerdos por la «Fuente Termal del Arapey» con su similar del departamento de Artigas, pero nada se logró y la incertidumbre continuó.
GESTIONES
Poco tiempo después, la «Junta Departamental de Salto» aprobó una Moción del «Edil Andrade Ambrosoni», en la misma, proponía un «Proyecto» para que legisladores salteños trabajarán para lograr la transferencia de la «Termal Arapey» a la órbita del municipio salteño. El Dr. Cassinoni cómo diputado por Salto, le correspondió el honor de formular la propuesta, y más tarde, los diputados Delfos Roche, Ulises Pereira Reverbel y Renán Rodríguez, presentaron su propuesta, pero ninguna de ellas, obtuvieron resultados favorables. Sin embargo en 1957, la «Ciudad de Salto» fue denominada «Capital del Turismo Nacional» por sus atractivos turísticos: «Rápidos del Salto Grande y sus islas» y las «Surgentes Termales del Arapey y Daymán».
TRANSFERENCIA DEL PREDIO MILITAR
A finales del año 1959, una delegación del gobierno nacional, encabezada por el «Concejal Víctor Haedo» visitaba la Termal Arapey, presentando luego un informe muy favorable. Al año siguiente, el «Gral. Rebollo» – Inspector General del Ejército, se reuniría con una comitiva de representantes salteños en el Arapey, para abordar el tema de la transferencia del predio militar. Estás visitas ayudaron a allanar el camino y en noviembre de 1960 se aprueba la Ley Nº 12.794 por la cual el Senado y la Cámara de Representantes de la República Oriental del Uruguay, decretan la transferencia al Gobierno Departamental de Salto del inmueble rural empadronado con el Nº 166, ubicado en la 8ª sección judicial para la formación del «Centro Turístico y Estación Termal». Dicho predio tenía una superficie de 435 hectáreas y 228 m2 y se lo cedía al gobierno departamental en forma gratuita.
PISCINA DEPORTIVA
En ese mismo año, comenzaría a construirse la «Piscina Deportiva», integrándose en la misma: el arte, la arquitectura y el paisaje. En 1963 se realizan los estudios para construir los gabinetes higiénicos y vestuarios para la Piscina Deportiva y de Niños. En 1964 se realizaron los murales por los escultores: Leopoldo Nóvoa (España) y José Echave (Salto-Uruguay), y los arquitectos salteños César Rodríguez Musmanno y Lucas Gaffrée. En esa época las «Termas del Arapey» ya eran consideradas internacionales y se veía desbordada por la alta concurrencia de turistas… Pero finalmente, luego de un largo camino… eran del pueblo salteño…
Fotografías:
El Heraldo Salteño y Verdad Salteña
Bibliografía:
Actas del Concejo Departamental de Salto – Intendencia de Salto.
Anuarios El Heraldo Salteño (1957, 1959,1960 y 1961).
Diario: Verdad Salteña
«Termas del Arapey y Daymán» – Las Políticas Públicas y su influencia en el Producto Turístico Termal (1941-2015). María Rosario Lombardo Custodio.
