Un ex-jugador de fútbol que desde los 4 años corrió detrás de una pelota, a los 15 años ya era titular en Peñarol, parte de una generación que ganó todo con gente de la cantera y se metió en la historia grande del fútbol salteño. Un puntero derecho endiablado con la magia del potrero, Ángel Rafael Cabrera, en diálogo con CAMBIO cuenta su vida en el fútbol. “La familia de mi mamá Isabel, es oriunda de Pueblo Lluberas, pero yo nací en el barrio Ceibal en calle Morquio y Juan H. Paiva, mi primer regalo fue una pelota con 4 años jugué los mundialitos del CRES, después un poco más grande nos fuimos a vivir al barrio Barbieri, nosotros habíamos venido de afuera y alquilábamos, donde también tengo lindos recuerdos. Hice parte del Baby Fútbol en Sol de América con “Quique” Ribero un adelantado en aquella época de formar o trabajar con niños, tuve un pasaje por el Remeros hasta los 12 años, después cuando cumplí 13 años me inscribo en la Liga Salteña de Fútbol para jugar con 13 años en las inferiores de Peñarol, donde con 15 años empiezo a jugar en primera de forma ininterrumpida hasta los 24 años, casi 10 años, jugando en primera, que fue cuando empecé a trabajar en la construcción, formar mi familia”, recordó en primera instancia.
SELECCIONES
“Jugué en muchas selecciones de Baby, también en grandes selecciones juveniles de Salto eso a grandes rasgos fue mi pasaje por el fútbol salteño, en selecciones jugué un año en el Comercial en “La Pulpería” con Walter “Chino” Galliazzi que termino como goleador y después un año jugué en Sud América recuerdo una Liguilla, el que me llevó fue Carlos Sagradini que era el técnico en ese momento. Me retiré muy joven del fútbol, pude haber jugado en el fútbol profesional en mi mejor momento en las selecciones juveniles de Salto, donde venían emisarios de Montevideo a ver esos campeonatos, además Salto siempre tuvo grandes equipos en formativas, tuve la oportunidad de ir a Peñarol, Danubio y Liverpool, pero eran otros tiempos, todo quedaba lejos, no existía la comunicación que existe hoy, yo era de la familia y extrañaba estar lejos, además antes tenías que irte a Montevideo y arreglarte como puedas y después poder triunfar como le pasó a muchos salteños. Pero no me arrepiento de haber tenido la oportunidad de jugar en el fútbol profesional y no haberse dado, estuve muy feliz de haber sido parte de esa generación exitosa de Peñarol de Salto, que apostó a la cantera del club una generación que logro dos ascensos a la “A” ganando todo y cuando en la “B” había grandes equipos y había que jugar un año creo perdimos un solo partido y el otro de forma invicta, años ’91 y ’95 jugar muchas liguillas en la “B” y la “A”. También salimos vice-campeones salteños perdimos con Deportivo que había perdido la final de OFI en 1992, en el ’93 jugamos la Copa de Clubes de OFI con Peñarol, tengo lindos recuerdos, una gran generación que quedó cerca de lograr más objetivos, todos eramos muy gurises, debido al tema económico, no se reforzó con un jugador por línea de experiencia, lo que nos hubiera facilitado poder haber llegado más lejos.”, rememoró
PUNTERO DERECHO
Cabrera se desempeñó siempre como extremo por el costado derecho. “Siempre me gustó jugar de puntero derecho pegado a la raya mí madre venía de familia futbolera, nací escuchando el gol de Ghiggia, en el mundial del ’50 después mirando televisión siempre me gustaban los punteros derechos, me gustaba Jorge Cabrera que salió campeón de América con Peñarol en el ’87 antes me gustaba “Pinocho” Vargas, Venancio Ramos, por eso siempre me gustó jugar de puntero pegado a la raya, desbordar y meter el centro para que el “Carre” Filippini o el “Chinito” Galliazzi hicieran muchos goles en Peñarol, recuerdo en el ’91 fue el “Carre” Filippini goleador del salteño y en el ’95 el “Chinito” Galliazzi salió goleador del salteño, yo hacía goles pero lo mio era jugar para el equipo mis compañeros desde niño hasta que deje de jugar en primera. En la actualidad se perdió no solo el fútbol del potrero, también los campeonatos de barrios, que se hacían cuando salías del Baby Fútbol, recuerdo cuando paso a vivir en el barrio Barbieri, los campeonatos que se organizaban en la Capilla “San Cayetano” que reunía a muchos gurises de la zona se hacían grandes campeonatos, venía a jugar de todos lados. Esas cosas se perdieron y de ese tipo de campeonatos salieron los grandes jugadores que dio el fútbol salteño, que muchos de ellos después triunfaron en el fútbol profesional. Yo jugaba en un cuadro comandado por Mendoza que era un vecino del barrio que tenía un cuadro, pero un cuadro con el cuál salíamos a competir a otros barrios, que también tenía sus cuadros formados y de todo ese tipo de campeonatos de barrios, con gurises que salían del Baby pero eran todavía muy chcios para jugar en la cuarta o tercera que era lo que ofrecían los clubes, además una linda edad 13 y 14 años, recuerdo teníamos un buzo todo casero con los números atrás, así nos presentábamos a jugar con equipos de La Tablada, el Williams, barrio Artigas y otros barrios, teníamos un lindo cuadro. Otra cosa que se perdió fue el campito, detrás de mi casa había un campo grande, donde se juntaba mucha gente de todas las edades a jugar y yo me entreveraba, era un gurí y me gustaba jugar con gente mayor, de los cuáles uno aprendía mucho, eso marcaba la diferencia, para llegar a ser un gran jugador, hay que desarrollar habilidad para poder sobrevivir”.
PEÑAROL DE 1991
Finalmente recordó la hazaña del título de Peñarol en 1991.“Nunca pensamos que íbamos a salir campeones, antes en la “B” había grandes cuadros, la mayoría con hombres, jugadores con trayectoria, sin ir más lejos Chaná, que en ese momento tenía el mejor equipo, con “Talento” Da Silva, “Edi” Olivera, Ruben Cardozo, eran los candidatos, hicimos un gran campeonato y les ganamos la final, un día de lluvia pero como era en noviembre, en esa final pese al tiempo se vendieron muchas entradas y la recaudación dio que hablar, era porque la gente que le gustaba el fútbol fue a ver jugar a Peñarol, que Jorge Soria le había implantado un estilo de juego que dejó su marca, de las cosas lindas del fútbol, hice un gol y di el pase del otro al “Carre” Filipini para el 2 a 1 ante el aplauso y el reconocimiento de la gente que nunca más me voy a olvidar. Después en 1992 ya en primera, hicimos un gran campeonato donde hubo cuadros que no le jugaron a Deportivo, de todas maneras le ganamos a la mayoría y jugamos la final con Deportivo que venía de perder la final de la Copa de Clubes con Punta del Este de Maldonado, que bien pudo ganarla, una gran final en el Estadio Dickinson, estuvo para cualquiera y en el final “Pelado” Mezza marco el 3 a 2, terminamos vice-campeones salteños, para en el 93 jugar nosotros la Copa de clubes de OFI otro lindo recuerdo. Pero en esa final ante Deportivo me marcó un gran lateral izquierdo que tuvo el fútbol salteño, Rodolfo “Perro” Suárez, él papá de Luis Suárez que en ese entonces era mascota de Deportivo, de todas maneras me las ingenié para superarlo por la raya, otra de las cosa imborrables para mí en mi carrera como jugador de fútbol. De mis goles recuerdo ante San Eugenio de Artigas por la copa de clubes, que tuve que jugar casi de delantero gol estaban lesionados el “Chino” Galliazzi y el “Carre” Filippini, hice el gol empatamos 1 a 1 y después acá nos ganan y nos eliminan jugando de contragolpe, nosotros sin goleadores, tuvimos para ganar erramos muchos goles y ellos nos llegaron de contragolpe y nos ganaron eran la selección de Artigas. Antes de terminar no me quiero olvidar del Peñarol del 95 también dirigido por Jorge Soria, fue otro año donde hicimos un gran campeonato en la “B” salimos campeones invictos, les ganamos a todos, le sacamos 17 puntos a Sud América que entró segundo a la liguilla, de todas maneras jugamos una final con ellos y les ganamos 3 a 1 con dos goles del “Chino” Galliazzi y un gol del “Carre” Filippini, tengo ese cuadro en casa un gran campeonato fue ese también donde nadie nos regaló nada, después jugamos un par de años en la “A” recuerdo un golazo en la hora a Ceibal en su mejor momento estaba jugando la copa de OFI de clubes, jugamos un miércoles y le ganamos 2 a 1 con un gol mio en la hora”.
