martes 16 de abril, 2024
  • 8 am

Gastronómicos del sector termal conformes con concurrencia de visitantes y ya planifican setiembre

Por Andrés Torterola.
El comerciante y empresario gastronómico de Termas del Daymán, Marcelo Faccini, en dialogo con CAMBIO dijo que la primera semana de vacaciones el movimiento comercial no fue bueno, la segunda fue muy alentadora ya que aumentó la llegada de turistas y se estima que el próximo fin de semana habrá buena concurrencia. Faccini dijo que en Dayman está toda la infraestructura para trabajar, sería necesario una buena promoción, que esté debidamente cuidado el lugar en lo referente a calles, iluminación, limpieza arreglar la costanera y que sea buena la concurrencia de turistas. La infraestructura es toda de capitales privados por lo tanto la atención que se brinda es la mejor. El empresario aseguró que las expectativas son bastante buenas, en esta oportunidad con una visión hacia las vacaciones del mes de setiembre, en ese sentido aseguró que ya hay turistas comunicándose, esto con casi nada de promoción si fuera diferente sería mucho más productivo para el sector.
NO VOLVERÁ A SER COMO ANTES
La Asociación Española de Expertos Científicos en Turismo –AECIT- en su informe indica que la de ahora se denomina fase reactiva, donde se trata de minimizar los daños de esta crisis, sanitaria en origen, pero con una derivada económica cuya dimensión aún no es posible valorar con claridad, aunque será muy severa. No obstante, también debe verse como una oportunidad que, manejada inteligentemente, debería dar pie a una reflexión constructiva y serena, más allá de las urgencias que estas catástrofes provocan, que permita extraer lecciones para mejorar, sobre todo, la acción preventiva; que permita corregir errores y mejorar los protocolos de actuación, a la par que reafirmar aquellos que funcionaron bien; que posibilite la puesta en marcha de un proceso de aprendizaje, con la institucionalización de los correspondientes mecanismos, que dé pie a elaborar un modelo preventivo de gestión de las crisis a las que el sector turismo es propenso, sabiendo que cada caso es único y singular y que, por tanto, no puede separarse de su contexto. Una primera consecuencia a extraer es que creíamos que, en materia turística, bastaba con vender sol, playa, paisajes, monumentos históricos, fiestas…y nos encontramos ahora con que también, y fundamentalmente, hay que vender confianza, ligada a la seguridad y la salud, con la particularidad que ha de ser doble: confianza en los mercados de destino”.