En tres jornadas de ventas, el mercado lanero australiano tuvo subas y bajas, con un tipo de cambio que al cerrar la semana terminó siendo negativo para el análisis en la moneda norteamericana.
La decisión de Vladimir Putin de invadir Ucrania ha llevado a un fortalecimiento del dólar estadounidense frente a sus pares, principalmente a las monedas consideradas de refugio seguro y a aquellas dependientes de materias primas como el dólar australiano. Esto generó que a pesar de la firmeza en los valores en la moneda local, ayer jueves, el mercado terminara retrocediendo varios centavos.
A la incertidumbre que genera este conflicto bélico, su impacto en la economía y ante todo su efecto sobre el consumidor final en los principales mercados a nivel mundial, se le suma la problemática que ha generado el coronavirus, con atrasos en los embarques marítimos que enlentecen la logística y al mismo tiempo la cadena de pago.
El Indicador de Mercados del Este (IME) cerró a US$ 10,21 esta semana, tres centavos por debajo del cierre del pasado 17 de febrero. En tanto que en la moneda australiana, el indicador cerró a A$ 14,21, con un centavo de suba.
La semana, luego de las tres jornadas de ventas sumó un total de 46.710 fardos, un 4,7% menos que lo ofertado la semana pasada. Esta semana se incluyó 1.360 fardos procedentes de Nueva Zelanda en la operativa. Se colocó el 88,1% del total propuesto por los productores australianos.
La próxima semana retornaran las ventas, en tres jornadas de actividad. Los días martes 2 y miércoles 3 de marzo estarán operativos los tres centros de ventas, en tanto que el jueves 4 de marzo únicamente estará el centro de Melbourne.
La oferta está prevista en 51.295 fardos, donde se incluye una oferta de lanas superfinas en Sidney.
