Armando Guglielmone
Adiestrador canino, educador etólogo
Especialista en problemas de conducta
Contacto : 098 536 982
Adiestrar al perro, ¿o no? Es normal que muchas personas se planteen esto al sopesar la conveniencia de tener un perro “enseñado”. La realidad de esto no es tan simple ya que, a ver, no todos los perros necesitan adiestramiento, pero si todos los perros deben ser educados. Esto es que tenemos personas que tienen su perro como mascota, y el ejemplar en cuestión es equilibrado, sumiso y de carácter linfático, probablemente pase sus días casi sin hacer notar su presencia. Si a esto le sumamos que su dueño, sea por el motivo que sea, no tiene pensado dedicarle tiempo a salir por ejemplo a caminar con el, carece de sentido práctico enseñarle ejercicios clásicos de adiestramiento, en este caso es más recomendable educar al perro en función de las necesidades del dueño, que se quede tranquilo para comer, que no entre a la casa sin autorización, etc., que son pautas de conducta que responden más a las exigencias del dueño sobre su perro, que desea convivir bien con su perro, pero no necesariamente interactuar con él. También puede ser, me ha ocurrido, que personas que viven en quintas o chacras, demandan que su perro acuda si lo llama, o que se quede quieto, pero no tienen pensado salir a caminar de la correa con el como uno lo haría en la ciudad, pues lo necesitan por ejemplo para cuidar el recinto y no específicamente para, otra vez, compartir con el perro. Cada perro es un ser individual aunque puedan compartir semejanzas físicas y genéticas, y debería ser adiestrado, si es la decisión, en función de las necesidades del dueño y de las capacidades o características de la raza, por ejemplo pretender que un labrador cumpla la función del perro de defensa, es una aberración, estamos yendo contra la naturaleza de las funciones que se busco en esta raza en particular, que halla ejemplares desequilibrados (que los hay) y muerden lo que les cruce, obedece a un desequilibrio patológico y no a una generalidad racial. Con los mestizos es otra historia, si es una cruza y sabemos de que, podemos al menos especular su comportamiento o cualidad heredada, con los que no sabemos sus orígenes, es a suerte o verdad, por eso habrá que ir estudiando y evaluando al perro a medida de que este crezca. Lo que en definitiva quiero decir es que no todos los perros necesitan ser adiestrados, pero si todos los perros necesitan ser educados. Adiestrar un perro, es decir, ordenarle que ejecute ordenes como sentarse, echarse e incluso caminar a nuestro lado, es relativamente sencillo. Aún sin conocimientos de etología canina, existen personas que mediante el sometimiento y la sumisión lo hacen, total, el que aguanta el trato es el perro y no le va a contar a su dueño como lo haría un niño al llegar de la escuela si fue maltratado, ahora para el entendido es fácil saber si un perro obedece por sumisión o no.
Cuando me toca un perro que ha pasado por malas experiencias, me doy cuenta pues hay síntomas que delatan esto con su comportamiento, por eso el adiestrador que es educador debe saber “leer” al perro, y tratar de que socialice de una manera correcta con su entorno. Hoy es fácil caer en el engaño, por todos lados vemos improvisados que creyendo que mirando videos en youtube, vistiéndose de determinada manera, o auspiciando su sapiencia, hacen que el que no está muy metido en el tema se seduzca por eso, y al ofrecer un trabajo que requiere de preparación, experimentación y sobre todo resultados, a un precio de oferta, completa el paquete del timo al cliente, Por eso exiga ver resultados, y aquí si que para muestra no basta un botón, debe ver diferentes perros, de diferentes razas, comportándose como pretende usted, es la única manera de tener pruebas reales de resultados para lo que paga y exige.
