El mercado lanero local ha mostrado una recuperación, particularmente en las lanas gruesas. Josefina Sanguinetti, analista del Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL), señaló que la demanda por Corriedale ha crecido, permitiendo vaciar galpones que el año pasado acumulaban stock. Hoy, muchos lotes se comercializan por encima del dólar y, si cuentan con certificaciones como la grifa verde, alcanzan valores cercanos a los dos dólares. En cuanto a las lanas finas, el merino de 16-17 micras ha logrado operaciones superiores a los 7 dólares, mientras que el merino medio (19-21 micras) se ubica entre 5 y 6 dólares según la certificación.
Sanguinetti explicó que una posible reducción en la oferta de lana australiana podría afirmar aún más los precios en los próximos meses. Sin embargo, advirtió que el factor determinante será la demanda final. «Europa sigue en recesión y con pérdida del poder adquisitivo, sobre todo en la clase media, que era el público masivo de estos productos», comentó la especialista. Esta situación puede afectar las ventas, ya que el mercado europeo es uno de los principales destinos de la lana uruguaya.
Pese a la incertidumbre económica en Europa, hay señales positivas. A diferencia de años anteriores, las hilanderías europeas no cuentan con grandes stocks, lo que podría impulsar una mayor demanda en el corto plazo. Esto brindaría estabilidad a los precios y permitiría que la mejora observada en el mercado local se sostenga en el tiempo. Con un escenario externo complejo, los productores uruguayos siguen de cerca la evolución de los mercados para planificar sus ventas estratégicamente.
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