Saladero volvió a la victoria y lo hizo con contundencia ante Parque Solari, para acercarse nuevamente a la punta.
Fue más el equipo albinegro en el primer tiempo y lo hizo saber. Supo jugar con los desniveles del terreno, que a veces pedían pelotazo, a veces trato sutil y toque corto. Parque Solari se vio de momentos mal parado, dejando huecos delicados en su defensa que permitieron, así sea por las bandas por el medio, el ingreso de los delanteros saladeriless. De esa forma se daría el primer gol, que tuvo incluso el factor “estado del terreno de juego”, ya que la definición de Albín encuentra una respuesta de Aranda tras un pique irregular y, acto seguido, el balón pica nuevamente de forma imprevisible y termina metiéndose en las redes. Por méritos, el gol fue merecido, pero no deja de ser curiosa la forma en la que el césped jugó a favor de Saladero en el primer tanto. Ya después de eso el equipo del frigorífico mostró otra soltura y de esa forma amplió la ventaja con un desborde de Luquez y “centro de la muerte” para la pincelada de Albín que duplicaba su score personal además del del marcador.
El segundo tiempo pudo ser un mojón en favor de Parque pero la falta de puntería determinó que el descuento motivador nunca llegara. Esto también fue gracias a la correcta labor defensiva encabezada por Bueno y apoyada por José Píriz. Este último tendría su gol tras un centro al segundo palo que no logra cortar Aranda, fallando en el cálculo, permitiendo que el histórico de Saladero empujara la pelota a través de la línea de meta. Triunfo que revitaliza a Saladero en la tabla.
Adrián Canosa
