El inicio de la zafra de sandías en la Unidad Agroalimentaria Metropolitana (UAM) marca un cambio en la dinámica del mercado de frutas esta semana, con el ingreso del primer productor de Tranqueras, Rivera, el pasado jueves. La llegada de la producción riverense impulsa la oferta de sandías del tipo estándar, así como también la del tipo «baby», que hasta el momento era procedente del litoral norte, lo que ha generado una presión a la baja en sus precios.
Durante esta semana, el volumen de sandías comercializadas aumentó en un 23 %, alcanzando las 214 toneladas. A pesar de este incremento, los precios promedio cayeron un 5 %, situándose en 56 pesos por kilo. Este comportamiento es característico del inicio de las zafras, donde existe una competencia más intensa en el mercado mayorista.
El melón también experimentó un incremento en su volumen, con 25 % más toneladas ingresadas, aunque su precio promedio descendió un 28 %. Los problemas de sobremadurez y podredumbres debido al traslado y las altas temperaturas, han presionado los valores. Por otro lado, las frutillas, con menor volumen disponible, mostraron problemas similares, manteniéndose entre los productos más afectados por condiciones climáticas adversas.
Hortalizas
Esta semana se experimentó en la UAM, un aumento en la calidad y cantidad de hortalizas frescas, impulsado por el descenso de las temperaturas y días nublados. Estos cambios climáticos favorecieron el desarrollo de productos como acelga, espinaca, lechuga, remolacha y brócoli, cuyas mejoras en calibre y aspecto permitieron mantener precios estables o incluso más bajos en comparación con la semana anterior.
En el caso de las hortalizas de hoja, brote e inflorescencia, se observó un incremento en la oferta, acompañado por descensos de precios en productos como la lechuga (-3 %) y la remolacha (-5 %). Este grupo destacó por su excelente presentación comercial, con hojas de colores más vivos y tallos de mayor calibre.
Los cultivos de maíz dulce, provenientes tanto del litoral norte como de la zona sur, registraron una fuerte presión a la baja en sus precios debido a la abundante oferta.
Por otro lado, las hortalizas de fruto presentaron dinámicas contrastantes. Si bien el tomate, producto clave en este grupo, experimentó una reducción del 20 % en su precio debido al acelerado crecimiento y maduración provocado por el calor previo, otras variedades como zapallito y calabacín aumentaron significativamente su volumen en plaza, con incrementos del 8 % y 51 %, respectivamente.
En contraste, el morrón verde presentó valores máximos hacia el final de la semana, en parte por la llegada de las primeras partidas de la zona sur, de mejor calidad.
Las hortalizas secas también mostraron movimientos relevantes. La cebolla continuó su tendencia bajista, con una caída del 24 % en su precio promedio. Este comportamiento se atribuye al ingreso de partidas del sur, particularmente del tipo amarilla, que domina la oferta.
En cuanto a las papas, las cosechas recientes presentaron problemas de calidad, como falta de sazón y heridas en los tubérculos, lo que redujo su valor comercial frente a partidas de la zafra anterior.
Canasta
En términos generales, el mercado de frutas y hortalizas en la UAM mostró una leve contracción, con un 2 % menos de volumen total comercializado respecto a la semana anterior. No obstante, el descenso del Valor Kilo Canasta (VKC), que pasó de 52,2 a 49,7 pesos, una caída del 4,7%, como resultado de precios más bajos en varias categorías clave.
