Por Karina De Mattos.
Los uruguayos recordaron ayer a los detenidos desaparecidos durante la dictadura militar, en la capital del país se realizaron actividades diversas pero ninguna marcha, la arteria principal, 18 de Julio, sobre Plaza Libertad amaneció con miles de pisadas pintadas y las imágenes de los 197 desaparecidos, que demostraron que a pesar de las medidas de aislamiento social adoptadas por la emergencia sanitaria los y las uruguayas estaban presentes conmemorando la fecha que desde hace 25 años había colmado las calles en cada edición. Como decía un material audiovisual alusivo, esta fue la primera vez que el silencio marchó solo por 18 de julio.
LLAMAS ENCENDIDAS
En el departamento de Salto los ciudadanos que luchan por el esclarecimiento de los crímenes cometidos a los derechos humanos durante la dictadura cívico militar se manifestaron de una manera diferente a la acostumbrada y obedeciendo las recomendaciones del Ministerio de Salud Pública. No se realizó la tradicional marcha con los carteles, sin embargo y a pesar de la lluvia que se hizo presente al igual que el año pasado, se realizó una concentración de corta duración respetando el distanciamiento y con tapabocas. Ésta se realizó en Plaza Artigas donde los y las salteñas se acercaron a dejar una margarita de papel a la que le faltan pétalos, símbolo de la organización Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos. Los pétalos que faltan simbolizan los uruguayos que faltan, familiares de cientos de familias que esperan saber su paradero. Este año el colectivo se movilizó bajo el lema «Son memoria. Son presente. ¿Dónde están?», y la plaza céntrica lució un “¿Dónde están?” conformado por velas que la lluvia no pudo apagar.
VERDAD Y JUSTICIA
Ingrid Urroz, una de las referentes en Salto en cuanto a la lucha de por los derechos humanos y ex presa política declaró a los medios de comunicación luego de la concentración: “A pesar de las lágrimas, a pesar del dolor de los días, de los recuerdos, las nostalgias y las añoranzas aquí estuvimos todos de nuevo pidiendo verdad y saber dónde están.
Venimos de una larga marcha que no solo es de 25 años marchando por las calles sino que venimos de un camino largo donde primero se nos negó, y luego se dijo que eramos solo seis, la verdad siempre sale a la luz, los huesos hablan y la tierra nos trae la verdad y aquí estamos reclamando y esperando que este sea el último año, porque ellos están en algún lugar y alguien sabe, estamos esperando por 195 compatriotas porque hay 6 que ya recuperamos. Con respecto a los salteños tenemos un compañero recuperado que es Hugo Cacciavillani, hace algunos años lo trajimos desde Córdoba y hoy descansan junto a su madre que también era salteña y fue otra madre que se fué sin saber dónde estaba su hijo. Esta es una lucha que continúa, una herida que no se cierra”.
La actividad incluyó la clásica lectura de cada uno de los nombres de los desaparecidos con la afirmación general: Presente.
