La dirigencia de la Liga Salteña de Fútbol sigue analizando las obras que realizará en el estadio Dickinson, que apuntan a aumentar la capacidad locativa y la comodidad para los espectadores, así como mejorar las cabinas de los trabajadores de la prensa y el piso del campo de juego. En ese sentido los dirigentes vienen trabajando en las alternativas, consultando a jugadores salteños del fútbol profesional que han tenido la oportunidad de jugar en canchas de piso sintético, como el Complejo Rentistas y el Estadio Charrúa. Las recomendaciones que recibieron fueron de seguir el mismo camino y con ese afán se continuará avanzando. Esta semana los arquitectos tendrían pronto un compendio de imágenes digitales de cómo quedaría el proyecto terminado y con él se facilitaría la búsqueda de ingresos y llegar a un acuerdo con el Ministerio de Transporte y Obras Públicas para concretar un necesario convenio.