viernes 19 de abril, 2024
  • 8 am

Los perros de Armando: Si lo supiera el lobo

Armando Guglielmone
Adiestrador Canino – Educador Etólogo
Represent. Ovejeros Alemanes Von Schutzmann
Contacto : 098 539 682
Hace muy poco los Países Bajos prohibieron la tenencia y reproducción de la raza Pug y otras razas de hocico chato sentando un precedente histórico en lo que al mundo canino se refiere. Ya hace años que varias razas han sido prohibidas en diferentes países siempre asociadas al mote de “perro potencialmente peligroso” y me he cansado de estar en contra pues el responsable de la peligrosidad siempre es el dueño y no la raza, pero en esta ocasión la prohibición está asociada al sufrimiento de los perros de estas razas provocado mayormente por la conformación de su cráneo, braquicéfalo. Los perros braquicéfalos son los que tienen el hocico corto y en algunos casos carecen de él parcial o totalmente, esto provoca que tengan una dificultad evidente para respirar, con apnea constante, un jadeo que sin importar la época del año es profuso ya que para mantener la temperatura corporal los perros dependen de este jadeo y al no tener caña nasal el aire que entra es insuficiente y sin filtrar. La expectativa de vida de estos animalitos no es muy larga por regla general y su vida es de un sufrir constante ya que su característica física provocada por la perpetuación de deformidades por selección y antojo del hombre aunque visualmente tal vez simpática es incompatible con un biotipo saludable; en la naturaleza no existen cánidos de hocico chato, no sobrevivirían, la selección natural no lo permitiría. Y es que acá no hablamos de un acto de bondad de alguien que se encarga de cuidar un perrito que nació con defectos físicos, esta es la selección y reproducción deliberada de estos defectos adrede en pos del gusto estético, si se puede decir, del hombre. El precio de estos perros siempre es excesivo, sobre todo si lo comparamos con el valor de razas funcionales que no presentan malformaciones que impidan como mínimo el ejercicio intenso sin provocarle un síncope o incluso la muerte.
Es que reproducir perros de estas razas no es fácil, generalmente se recurre a inseminación artificial y al nacimiento por cesárea, ya que su conformación no favorece la monta natural y/o el parto. Cuando adiestro perros de estas razas si es en verano debo hacerlo lo más temprano posible pues la fatiga que les provoca caminar y respirar es impresionante y preste atención el lector que digo “caminar y respirar”, no hacer ejercicio intenso. Esto tendría que ser una cuestión de sentido común, el hecho de no tener un perro que sufrirá toda su vida solo para satisfacer nuestros deseos pero como bien se dice, somos hijos del rigor, solo si nos obligan no hacemos algo.