Por Pablo Vela
Políticamente hablando, por cosas así es que queremos ser un sector nuevo para el Partido Colorado, para cualquier ciudadano que entienda que no tiene otras personas que puedan ser sus representantes a la hora de definir aspectos esenciales del diario vivir.
El I.A.S.S. fue creado en el 2008 por el Cr. Astori en el primer Gobierno del Frente Amplio y en su primer esquema fue declarado inconstitucional, logrando luego por algunos otros avatares políticos lograr que se declare constitucional; así es, de las primeras medidas de un gobierno progresista fue la de retenerle nuevamente dinero a aquellos que trabajaron toda su vida para recibir una jubilación digna al finalizar su etapa laboral.
A partir de allí se escucharon diferentes adjetivos a tal impuesto: inmoral, abusivo o injusto por detallar algunos.
Llegado el momento los hoy líderes de la coalición del gobierno afirmaron que se derogaría tal impuesto aunque ya estando en funciones eso tuvo algunos retrasos entre otras cosas por la pandemia sufrida que generó un manejo de los recursos públicos diferente al proyectado, ahora bien, sorteada la pandemia, lamentando fallecidos, reconociendo fortalezas y debilidades pero con un gobierno que transitó la pandemia con “éxito” se anunció, si bien algo mejor a lo actual, no lo prometido.
En Asamblea General del 2 de marzo pasado, nuestro presidente en lo que refiere a anuncios nos comunicaba de la rebaja de un 8% del impuesto ya harto aludido. No nos conformó, nos pareció escaso y que se podía hacer algo más, de hecho, si bien en un principio casi una veintena de legisladores apoyaron la minuta de comunicación enviada a Presidencia solicitando se active con la promesa, al final, luego de ese flaco anuncio solo el diputado Gustavo Zubía siguió adelante con su pedido, rechazó de plano tal anuncio.
Incluso dentro del mismo Partido Colorado se nos pidió bajar el perfil del rechazo, ante las constantes salidas enfáticas y públicas del diputado Zubía pero su compromiso con el ciudadano alimentó sus ganas y siguió insistiendo con el tema porque la promesa estaba, porque los jubilados afectados habían recibido cara a cara a los legisladores y merecían una repuesta diferente.
Consecuencia de esos reclamos, de otros hechos políticos ocurridos en el escenario nacional en los últimos días, arremetió nuevamente el Dr. Zubía en busca de respuestas más serias respecto al tema, incluyendo en las modificaciones que el P. Colorado elevó al Ejecutivo (para poder zanjar y votar la tan necesaria Reforma de la Seguridad Social) una rebaja mayor a la expresada.
La respuesta del Ejecutivo Nacional finalmente fue aceptar un 20 % en el descenso del impuesto en la primera franja para el año 2024 y para el 2025 otro 20 % más, finalizando este período en consecuencia con un descenso del 40 % del impuesto, además de la repercusión en otras franjas (que unilateralmente originó el Cr. Astori).
Es un enorme triunfo, para una banca de Diputados, la banca de TERCERA VÍA que a pesar de los dichos de otros líderes políticos sobre la imposible del pedido siguió con la firmeza y la tranquilidad de que el deber estaría cumplido si esos jubilados que pedían algo justo recibían algo mayor al anuncio del 2 de marzo.
Se logró, se insistió a pesar del poco apoyo extra e intra partidario (aunque sobre el final se incluyó la propuesta en las modificaciones de último momento sugeridas al Presidente) y hoy con tranquilidad podemos decir que nuevamente la franqueza y la transparencia de la personalidad del Dr. Gustavo Zubía están a salvo frente a los miles de jubilados que le plantearon la inquietud, que ayudaron en la comprensión del problema y que finalmente con algo se van a ver restituidos de ese impuesto inmoral, abusivo e injusto.
