
Un estudio comprobó que la educación emocional en las escuelas baja los niveles de agresividad y de tristeza entre los niños. El Parlamento uruguayo estudia un proyecto de ley para llevar este tipo de herramientas a los centros educativos. Una investigación llevada adelante en una escuela de Casavalle (Montevideo), es el punta pie inicial de este proyecto. Allí se revela que programas de educación emocional contribuyen a reducir los niveles de agresividad e inasistencias.
INVESTIGACIÓN
La docente que lleva adelante el proyecto es premiada en España por su trabajo e impulsada por su historia, una situación de extrema pobreza en su infancia en Uruguay:»Está comprobado que si nosotros enseñamos a los niños desde los tres años a los 16 años unas competencias emocionales que tienen que ver con el conocerse a sí mismo. El regular las emociones, el desarrollar la empatía y el desarrollarla cómo me veo, cómo me conozco», dijo. Eso fue lo que se comprobó en la Escuela 350 de Unidad Casavalle entre el año 2021 y finales del 2022, donde un estudio se centró en la implementación de una formación para el equipo docente y la aplicación de un pase a los alumnos, quienes previamente fueron evaluados junto a sus familias.
RESULTADOS
Los resultados mostraron que las variables dependientes, que median la agresión, las inasistencias y la tristeza, principales problemas indicados por los docentes, tienden a modificarse en la medida que se van aplicando programas de educación emocional a los alumnos observamos cómo la tendencia es a la baja.