jueves 3 de octubre, 2024
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“La Niña” está en curso y llega con más calor y menos lluvia a partir en octubre

Gabriel Rodriguez diputado

Distintos sitios de meteorología internacionales, advierten que la región será parte de un fenómeno como incidencia directa de encontrarnos en «La Niña», habrá más calor y menos lluvia, un combo que nos dejará expuesto a más incendios y temporales. Durante octubre -así como toda la primavera- se espera que llueva menos de lo normal y que, además, las temperaturas estén por encima de lo habitual, generando una suerte de combo. Esta situación es muy preocupante, ya que es esperable que las lluvias tengan un volumen o frecuencia muy por debajo de lo normal.
SEQUÍA
Esto se asocia a que se estará rodeado por una situación climática muy particular, que también incluye una sequía en el centro de Brasil y otra en el noroeste y centro argentino. A su vez, aún existe riesgo del probable advenimiento del fenómeno de La Niña, que representa que se tengan valores de precipitación por debajo de lo normal. Esto, asociado al déficit estacionario de precipitación, genera una mezcla que complica por la ocurrencia de incendios forestales. En cuanto a la temperatura, las estimaciones indican que estará por encima de lo normal para la época. Hay un calentamiento global sostenido desde el año 2014 a la fecha y esta tendencia se mantiene en cuanto a temperaturas. La primavera probablemente sea más seca que lo habitual y con temperaturas por encima de lo normal, lo cual dará ingreso a un verano muy marcado.
IMPACTOS
El Inicio del fenómeno La Niña, que se caracteriza por un fortalecimiento de los vientos alisios que confluyen en la zona de convergencia intertropical y un desplazamiento más temprano de esta hacia el norte de su posición habitual, además de un aumento de la convención en el océano pacífico, al oeste del meridiano de 180°, donde la temperatura del agua superficial del océano sube de su valor habitual (28 y 29 °C). Durante el desarrollo del fenómeno de La Niña se produce un debilitamiento de la corriente contra ecuatorial, lo que ocasiona que la influencia de las aguas cálidas proveniente de las costas asiáticas, afecten poco las aguas del pacífico de América.