Tras el cierre temporal de Dayman Meat anunciado por los propietarios de la planta, de capitales brasileños, se dio a conocer que la firma mantenía un importante adeudo con los trabajadores, consignatarios, productores y al mismo tiempo con compradores de carne en el exterior, quienes habrían adelantado dinero a la espera del producto.
En las últimas semanas, un grupo de inversores (nacionales y de varias nacionalidades) asumieron un arrendamiento de la planta por diez años, con opción a compra. Álvaro Barragán, el vocero de la nueva firma, dijo a CAMBIO: «lo que estamos haciendo es un arrendamiento a diez años con opción de compra», en este sentido explicó que «la compra sería hacernos cargo o comprarle el pasivo que ellos tienen y negociar con la gente que tiene el pasivo».
La prioridad para el nuevo grupo inversor, es «arreglar con el personal, que obviamente es la gente que está más necesitada y que tiene menos recursos» y posteriormente «hasta donde hemos estado indagando y sabiendo, las deudas son con los consignatarios de ganado, porque productor creo que no hay prácticamente nadie».
Barragán explicó que a esto se le suman «varios acreedores más, como pueden ser barracas, Ute, Ose, compras que quedaron colgadas y el Banco República, básicamente».
El vocero del grupo inversor dijo que se realizará en estos días una recorrida por la planta para «ver en qué estado está la planta, porque está casi abandonada, por lo pronto sabemos que dos máquinas de vacío las acusan de que las robaron y bueno, llevará su tiempo, nosotros queremos hacerlo lo antes posible y empezar a funcionar».
Indicó que entre otros de los temas que se encuentran en manos de los abogados, es la situación con la Dirección Nacional de Aduanas, que recientemente realizó un operativo en la planta y encontró maquinaría que se encontraría en presunta infracción aduanera.
Sobre el grupo inversor, dijo que «son personas de varias nacionalidades que algunos fueron afectados, porque le habían adelantado a la empresa dinero y también hay uruguayos».
La intención del grupo es comenzar lo más rápido posible a operar, y que los negocios a partir de ese momento sería «contado en el día». En principio, se mantendrá como el rubro principal la faena de ovinos, dada la demanda desde Brasil, pero «en un futuro esta si enfocar el tema de los vacunos, pero más adelante con el tiempo».
Consultado al respecto de la situación de la planta, el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Ing. Agr. Fernando Mattos, dijo que es un negocio entre privados, ajeno al ministerio, sin embargo indicó que se realizarán todos los trámites necesarios para que se logren las habilitaciones y la planta pueda volver a operar.
