viernes 24 de enero, 2025
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Agua y sombra para el ganado permite evitar pérdidas de preñez

Sol

Con el verano comenzando, días de calor y altas temperaturas generan estrés tanto a nivel de los seres humanos como también de los animales, esto claramente puede causar varios problemas a nivel productivo, como la pérdida de estado corporal del ganado, deshidratación, pérdidas de porcentajes de preñez y hasta muerte de animales.
La Dra. Valentina Herrera, de la regional litoral norte del Instituto Plan Agropecuario, señaló que es una etapa del año donde el clima «exige tomar cuidados especiales en el manejo del ganado en el establecimiento». En este sentido dijo que, por ejemplo, «si debemos buscar ganado para llevarlo a las mangas y realizar trabajos como vacunaciones (en febrero se vacuna contra la fiebre aftosa) u otras actividades, es importante organizarse y evitar los horarios de mayor calor, generalmente entre las 10:00 y las 16:00 horas».
La profesional recomendó realizar las tareas «temprano en la mañana o al final de la tarde». En el caso de realizar los trabajos a primera hora del día señaló que «conviene acercar previamente el ganado a potreros cercanos a las mangas o dejarlos en corrales amplios desde la tarde anterior», de manera de reducir «el estrés asociado al movimiento temprano y facilita el manejo».
Agua y Sombra
Es fundamental que los ganados dispongan de «agua y sombra suficientes» indicó la profesional y remarcó que «no se debe mantener a los animales encerrados durante muchas horas sin estas condiciones, ya que el riesgo de deshidratación y estrés calórico aumenta significativamente». En casos extremos, la ausencia de agua y sombra durante un extenso período de tiempo, «puede llevar a la muerte del ganado».
Desde el punto de vista reproductivo, las altas temperaturas también pueden afectar tanto a machos como hembras. «En los machos, el calor puede impactar negativamente la espermatogénesis (formación de espermatozoides), mientras que en las hembras puede causar pérdidas embrionarias debido a problemas en la irrigación sanguínea del útero» indicó la profesional, quién explicó que esto ocurre debido a que «el estrés calórico desvía el flujo sanguíneo hacia otras áreas del cuerpo, perjudicando el desarrollo embrionario».
Para evitar estos problemas, «es crucial planificar y preparar los potreros destinados a los rodeos de cría durante el verano» dijo Herrera, quien remarcó que los potreros «deben contar con suficiente agua y sombra, de manera que los animales estén cómodos y en condiciones óptimas».
Si los animales se encuentran a situaciones extremas de calor, con ausencia de sombra y agua suficiente, es probable que los productores se enfrenten «a un menor porcentaje de preñez al momento del diagnóstico de gestación, lo que impacta directamente en la productividad del rodeo» sostuvo.