El mercado de maíz en Chicago cerró a la baja tras una toma de ganancias por parte de los fondos de inversión, luego de haber alcanzado su nivel de precios más alto desde octubre de 2023.
A pesar de la fuerte suba en jornadas previas, el temor a un posible conflicto comercial entre Estados Unidos y México llevó a los operadores a actuar con cautela. La incertidumbre crece mientras se espera que el 1° de febrero la Casa Blanca defina su postura sobre la amenaza de Donald Trump de imponer aranceles del 25% a productos mexicanos y canadienses, una medida que podría afectar la comercialización del cereal.
En Sudamérica, las condiciones climáticas también jugaron su papel en la cotización del maíz. La siembra de la safrinha en Brasil avanza con lentitud, mientras que en Argentina la sequía amenaza con recortar aún más la producción.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó que el 98,7% de las 6,6 millones de hectáreas proyectadas ya fueron sembradas, con trabajos concentrados en el norte del área agrícola. Sin embargo, la falta de lluvias está afectando el desarrollo del cultivo, con una reducción en la proporción de lotes en estado óptimo. «El 24,5% del maíz tardío está entrando en su fase crítica y necesita lluvias urgentes para sostener su potencial de rendimiento», advirtió la Bolsa.
En cuanto a los precios, los contratos a marzo cerraron en 193 dólares por tonelada, con una baja de 2,66 dólares, mientras que los contratos a mayo cayeron 2,36 dólares hasta los 197,43 dólares por tonelada.
Rurales