Pacheco, el presidente que noqueó a los tupamaros

Por el Dr. Pablo Perna
El miércoles 6 de diciembre del 67, el Presidente Gestido, a la 1.35 de la madrugada muere repentinamente de un infarto en su casa; hacia 9 meses que había asumido. Ese mismo día a la hora 5.20, en Casa de Gobierno “semicerrada, apenas iluminada y solitaria”, “un escueto conjunto de hombres, serios y solemnes” protagonizan la firma del vicepresidente del acta oficial de la asunción de Jorge Pacheco Areco, de 47 años de edad, como Presidente de la República.
Uruguay era altamente alfabetizada, comenzaba a sonar los “The Beatles” y “The Rollingston”; los vaqueros aparecían como moda, las mujeres copan el campo laboral. El Che Guevara visitaba nuestro país y afirmaba que como Uruguay no había en América Latina, por lo que había que “cuidarla”. La izquierda criolla le hizo caso omiso, por lo que reciben a Pacheco con 6 bombas molotov dirigidas a la empresa CUTCSA. Seguía de esta manera la carrera delictiva de los Tupamaros en plena Democracia.
El 1º de enero del 69, asaltan al Poder Judicial, donde se seguían las causa penal de los guerrilleros; entre el mes de marzo y abril, el movimiento roba 7 sucursales de Bancos; el 16 de julio, roban del Museo Histórico Nacional la original “Bandera de los 33 Orientales”; el 8 de octubre, miembros del MLN toman por asalto la ciudad de Pando, donde matan a un joven que se dirigía a conocer a su segundo hijo recién nacido. El 4 de abril, asaltan 200 kilos de oro en liras esterlinas a una de las familias más ricas del Uruguay, “Los mailhos”. Se desata el “Plan Satán” que consistía en el secuestro de personalidades para pedir rescate de presos guerrilleros o dinero. Entre muchos secuestros, se destacan lo del embajador británico, del Cónsul de Brasil y del diplomático de los EEUU, que lo juzgan, torturan y matan.
El 5 de setiembre del 71, se produce en el Uruguay una de las fugas más increíbles en la historia, escapándose por un túnel 111 tupamaros del Penal de Punta Carretas. En el mes de octubre, un peón rural Pascasio Bàez, accidentalmente encuentra una “tatucera tupamara”, por lo que deciden ejecutarlo inyectándole una sobredosis de pentotal por temor a que los delate.
Lo mencionado son tan solo algunos ejemplos de los delitos cometidos por la guerrilla en nuestro país, en plena Democracia, que Pacheco la derrota sin vulnerar el Derecho. De esta manera el fundador del Frente Amplio, Gral. Seregni, lo afirmaba: “Aprendió rápido, aprendió lo que era el poder, y lo uso… Pero nunca trasgredió la Constitución y la ley».
Su lucha fue reconocida por el pueblo uruguayo, por tal motivo fue reelecto Presidente, ganándole a su oponente Wilson Ferreira Aldunate; pero no puede asumir en virtud que no se alcanzan los votos necesarios para la reforma constitucional.
Ayer, 29 de julio, se ha celebrado fecha de su fallecimiento, por tal motivo queríamos conmemorarlo, dando otra versión de los hechos, en clara oposición a la leyenda urbana que se ha elaborado por la izquierda contra su figura. Continuará.