lunes 28 de abril, 2025
  • 8 am

Los tres cerros de Pepe Núñez que esconden un secreto geológico: conductos de magma por erupción volcánica

Alvaro Lima

Cerro Bonito, Cerro de la Virgen y Cerro Picazo se parecen a cualquier otra elevación de la pradera uruguaya. Estos tres cerros de la zona de Pepe Núñez, departamento de Salto, son conductos de magma producto de un vulcanismo mucho más reciente del que se tenía conocimiento en el territorio: entre 50 millones y 60 millones de años, en la era cenozoica. De acuerdo a la valoración de una de las investigadoras del Instituto de Ciencias Geológicas de la Facultad de Ciencias de la UdelaR, Lucía olivera, dijo a El País “no son exactamente volcanes, sino conductos de magma que intentó llegar a la superficie. Se enfriaron lento (en comparación con los derrames de lava volcánica), son más resistentes que las que hay en los alrededores y su erosión ha sido diferente. Las rocas alcalinas, además, suelen tener un bajo porcentaje de dióxido de silicio.
DERRAMES
BASÁLTICOS
La edad también es otra diferencia y ha sido una sorpresa. Hasta ahora se conocían los derrames basálticos, en particular, en la región noroeste de Uruguay, que fueron consecuencia de la fragmentación del bloque continental que dio origen al océano Atlántico Sur hace unos 200 millones de años. Estos cerros son mucho más jóvenes y pertenecen a una época geológica en la que la configuración continental ya estaba estabilizada de una forma mucho más parecida a la actual.
PERTURBACIONES
Por otro lado Rossana Muzio, profesora adjunta de Petrología Ígnea de la Facultad de Ciencias, comentó que los conductos ahora llamados Bonito, de la Virgen y Picazo son el resultado de perturbaciones provocadas por movimientos de la corteza que profundizaron fracturas preexistentes y elevaron la temperatura a nivel del manto.
Estamos hablando de magmas que se generaron a más de 80 o 100 kilómetros de profundidad y que tuvieron un ascenso rapidísimo a la superficie. Las especialistas señalaron que lo que predomina en Uruguay son las lavas basálticas –que en el litoral alcanzan los mil metros de espesor– de aproximadamente 132 millones de años. Ahora identificamos este vulcanismo mucho más reciente y por eso es novedoso. La zona de Pepe Núñez ya fue objeto de trabajos geológicos. Hace unos 10 años, aproximadamente, se encontraron fracciones incipientes de hidrocarburos livianos. No necesariamente este fenómeno tiene que estar asociado a los conductos de magma.
INVESTIGACIÓN
Los tres cerros no están separados por más de tres kilómetros y la altura del más alto es de unos 300 metros. Eso facilita el trabajo de Olivera, puesto que buena parte de su trabajo se desarrolla en el campo y otra parte es en el laboratorio. En el área continúa buscando otros cuerpos similares más cerca del límite entre Salto y Tacuarembó, próximo a la zona de Quintana. En el laboratorio se cortan y arman láminas delgadas de roca para que puedan ser atravesadas por la luz del microscopio petrográfico. Así se analizan los minerales, se le da nombre a la roca y se practican análisis químicos. Las rocas alcalinas suelen estar enriquecidas con tierras raras que son un grupo de elementos que se utilizan para fabricar productos electrónicos (por ejemplo, el iterbio y el terbio tienen una alta conductividad eléctrica, mientras que el neodimio es utilizado en discos duros y vehículos eléctricos).