Por Andrés Torterola
En el Liceo Nº 5, turno matutino, la falta de profesores se ha vuelto una situación recurrente y cada vez más preocupante. Padres de estudiantes que asisten a esta institución señalan que, después de las vacaciones de septiembre, las ausencias docentes han aumentado significativamente. Expresan que hay asignaturas que han tenido tan pocas clases a lo largo del año que, hasta el momento, apenas se alcanzarían 20 clases en total. Esta semana en particular, se han registrado ausencias de hasta cuatro profesores en una misma jornada. Los estudiantes asisten al liceo, pero luego de recibir una sola clase, las horas siguientes quedan sin docentes, lo que repercute en su formación académica
UNA CLASE AL DÍA
La comunicación sobre la ausencia de profesores se realiza directamente entre el personal de inscripción y los alumnos, sin que se informe a los padres. A pesar de que el horario de ingreso es a las 7:15, esta semana los estudiantes han estado ingresando a las 9:00 o incluso a las 10:00, ya que los profesores de las primeras horas habían informado previamente que no asistirían al liceo. Como resultado, los alumnos solo tienen una clase en el día, lo que está agravando la situación. En algunas materias, donde las ausencias de los profesores eran recurrentes, se había convocado a docentes suplentes. Sin embargo, pocos días después de asumir el suplente, el profesor titular retoma sus funciones para luego volver a ausentarse. Esto genera que los estudiantes se quedan sin clases y no permite una continuidad con el suplente. Los padres han expresado su preocupación, ya que el problema parece empeorar, con el docente titular manteniendo certificaciones o ausencias con aviso, mientras los estudiantes quedan sin sus horas de clase.
SISTEMA CON VULNERABILIDADES
Según información a la que accedió CAMBIO, en esta época del año, varios profesores que participan en concursos tienen derecho a ausentarse hasta cinco días. Si el concurso incluye tanto una prueba teórica como una práctica, este permiso puede extenderse a diez días. No obstante, se ha constatado que muchos docentes presentan una cantidad significativa de ausencias, ya sea por certificaciones médicas o licencias por enfermedad. Aunque el sistema de certificaciones debería ser una herramienta confiable, presenta ciertas vulnerabilidades: algunos docentes asisten a una consulta médica, reciben una licencia de su médico, y esta es enviada al BPS ya las autoridades educativas sin verificaciones adicionales.
PREOCUPACIÓN
El sistema institucional establece procedimientos burocráticos que dificultan la asignación rápida de un suplente en caso de ausencia de un docente. Por ejemplo, si un profesor falta un jueves, los estudiantes no tendrán clases hasta la semana siguiente, ya que, según el reglamento, no se puede asignar un suplente de un día para otro. En cambio, la ausencia debe publicarse en el portal oficial para que todos los docentes suplentes tengan la oportunidad de postularse a la vacante, lo que demora la cobertura del puesto. Esta normativa, aunque garantiza igualdad de acceso a los suplentes, afecta la continuidad de las clases y la calidad educativa que reciben los estudiantes, generando preocupación entre los padres. De hecho el ausentismo docente se genera en todos los liceos, pero en este caso en particular los padres, expresan su preocupación ya que se está a muy pocos días de la finalización de los cursos y temen que sus hijos tengan dificultades en las pruebas finales.
