viernes 19 de abril, 2024
  • 8 am

Debido a la bajante del río Uruguay la represa de Salto Grande atraviesa marcado déficit energético

Por Mario Sancristóbal.
Como consecuencia de la bajante que experimenta el Río Uruguay y ante el advenimiento de las temporada estival que se anuncia será calurosa, por lo que seguramente habrá mucho consumo de energía, mantuvimos contacto con Fernando Alcarra, para conocer detalles de la proyección que tienen sobre la duración de este período de estiaje del Río y además si han habido bajantes tan pronunciadas en el tiempo como la que estamos viendo. Otro tema que preocupa es si no habrá restricciones en el consumo de energía y si hay suficiente producción para abastecer todas las necesidades.
SITUACIÓN HIDROLÓGICA
Los caudales de aporte previstos para las próximas semanas son de entre 500 y 750 m3/s, por lo que estamos ante una situación denominada técnicamente “estiaje severo”, donde se empieza a cuidar el agua del lago para asegurar el suministro hacia aguas abajo, con erogados mínimos de 600 m3/s promedio. Como referencia, el caudal medio “normal” es de 5600 m3/s.
El nivel del lago en la presa estará entre cotas 32 y 32,4 en los próximos días.
Hay lluvias pronosticadas para las tres cuencas de aporte, pero no son significativas.
Hay una situación de déficit hídrico en la región, que puede prolongarse hasta el fin del verano, vinculado a una condición llamada “niña” que consiste en un enfriamiento de la superficie del agua del océano Pacífico ecuatorial central. En la historia del río Uruguay hay varios estiajes muy pronunciados, incluso peores que el actual (por ejemplo, en 1944), con aportes de hasta 90 m3/s, pero de 2010 en adelante, la construcción de grandes presas en el alto Uruguay en Brasil, ha colaborado a que los estiajes no sean tan pronunciados, pues esas presas regulan y liberan caudales que han superado habitualmente los 200 m3/s. A pesar de ello, esas presas actualmente están con niveles que representan entre el 10% y el 50% de su volumen.
SITUACIÓN ENERGÉTICA
La energía diaria generada por Salto Grande estos días es de unos 4.000 Mega Watts hora (MWh), muy lejos de la capacidad máxima si hubiera agua disponible (máximo diario posible: 45.000 MWh), convirtiendo a este mes de noviembre, en el peor noviembre desde el comienzo de la operación de Salto Grande, en Energía acumulada. La generación de energía de Salto Grande actualmente es mínima, no es una prioridad, y se apoya al sistema eléctrico con potencia, regulación, y reserva de energía ante eventos inesperados y cortos, asegurando el suministro de agua por el río hacia aguas abajo para uso con fines sanitarios y domésticos.
No obstante, Uruguay tiene un sistema robusto de generación, que garantiza el suministro de la demanda, a un costo de generación mayor, pero que garantiza la energía. El mismo consiste de importantes inter conexiones con Argentina (2000 MVA por Salto Grande) y con Brasil (500 MVA por la conversora de Melo), que permiten el intercambio regional, más centrales térmicas de biomasa (las mayores, subproductos forestales), mas parques eólicos y solares, que son intermitentes, dependen del viento y el sol, pero se apoya en un moderno parque térmico, que mediante la quema de gas oil en la central Punta del Tigre de UTE, brinda la misma seguridad que da la energía hidroeléctrica cuando está disponible. De hecho el sistema es tan robusto, que permite estas semanas estar exportando energía térmica a Brasil.
Debido a la bajante del río Uruguay la represa de
Salto Grande atraviesa marcado déficit energético