Muchas de familias del extremo oeste de la ciudad desde hace más de cinco años esperan que sus hogares estén terminados, se trata de beneficiarios del Proyecto Integral de Barrio Artigas del Programa de Integración de Asentamientos Irregulares (PIAI). Este proyecto fue impulsado en el año 2015 y abarcaba el mejoramiento de la calidad de vida de tres asentamientos irregulares y la creación de centros educativos como un CAIF y una escuela. CAMBIO dialogó con Marta Morales, jefa de hogar y vocera del grupo de vecinos, quien comentó su ansiada espera por obtener su vivienda. Dijo que hace casi 6 años ya que están a la espera de las viviendas y pasan los meses y no hay novedades.
-¿No se está trabajando en la obra?
-En la obra están trabajando pero no avanza, hay cuatro o cinco obreros para poner un marco de una ventana. En la mañana de ayer visitamos la obra, con los vecinos a ver la obra, y eran las 10:30 de la mañana y ya estaban descansando los obreros. Bebiendo y comiendo, y no salió nadie a dialogar con nosotros.
-¿Le dieron una fecha de entrega de las viviendas?
-La semana pasada mantuvimos una reunión con la Intendencia de Salto y nos dijeron que iban a estar prontas trece seguras y posiblemente veinticinco viviendas para alrededor del 20 de diciembre serían entregadas. Luego nos aseguraron que sería el 23 de diciembre. Pero en el último contacto que mantuvieron con nosotros nos enviaron un audio que dice que la empresa constructora no envió los requisitos para realizar las condiciones básicas para las conexiones de agua y electricidad. Eso hace que la entrega de las viviendas se retrase aún más y no se entregaría ninguna vivienda hasta el año que viene. Porque ahora comienza la licencia del rubro de la construcción.
-¿Qué situación viven mientras tanto los vecinos?
-Yo vivo acá en Barrio Artigas en la zona a donde era el basurero municipal, yo hoy vivo en la casa de mi hijo. Pero tenemos otros vecinos que están alquilando y pagando cerca de 10 mil pesos de alquiler más los servicios básicos de luz y agua, y sabemos de otros vecinos que los han ultimado, que para estos días tienen que dejar las casas en las que viven y todavía están esperando, algunos en casa de familiares.
