viernes 26 de abril, 2024
  • 8 am

“El Frente Amplio cometió muchos errores, perdió cercanía con la gente y pecó de soberbia”

Por Julio Aguirrezábal
Con una postura más perfilado a un discurso nacional, pero sin descuidar lo departamental, Andrés Lima, dialogó con CAMBIO acerca de su visión de la realidad política actual. Es uno de los pocos dirigentes del Frente Amplio que no critica al gobierno nacional, pues entiende que es un momento de “estar juntos” y quienes no lo hacen se equivocan. Lima aspira a ser Senador de la República en las próximas elecciones, pero descartó –aunque se lo pidan- ser candidato presidencial. Lanzó duras críticas al FA y está convencido que si no se hacen las cosas bien la coalición llegará fortalecida a las próximas elecciones nacionales.


-¿Cómo viene con la campaña a nivel nacional?
-Viene muy bien, hemos encontrado un campo fértil, hay muchos frenteamplistas que están disgustados con algún sector de la dirigencia nacional por falta de respuestas en los últimos cinco años, falta de cercanía, sobre todo en el interior del país. Muchos nos expresan que quieren que el interior sea representado por alguien del Frente Amplio, entonces ese es el discurso y la propuesta que planteamos, ser una voz del interior que represente al interior en Montevideo, eso sí, para que te escuchen hay que tener expresión electoral, porque en política es así, si uno no tiene expresión electoral pueden ser muy lindas las propuestas, pero se quedarán en eso nada más. Canalizar todas esas propuestas del interior con una persona del interior con la finalidad de tener peso electoral para el día que el Frente Amplio tome decisiones.
-¿Cómo lo ven los dirigentes frenteamplistas de Montevideo con la presencia que tiene en los medios masivos?
-Me parece que sorprendidos. En mi caso también sorprendido. El hecho de ser el único Intendente del Frente Amplio en el interior da otra posición, en el período pasado había más intendentes del Frente, hoy en el interior soy el único. Creo que también, modestamente, el discurso y la postura política mía marca una línea distinta, siempre he criticado la oposición por el mero hecho de ser oposición, decir que todo lo que viene del Gobierno está mal, eso lo he marcado y me parece que eso ha sido bien recibido dentro y fuera del Frente Amplio.
-Siempre se dijo que los caudillos son patrimonio de los partidos tradicionales. ¿Cree que hubo o hay caudillos en el Frente Amplio?
-Hubo dos grandes líderes históricos, el General Líber Seregni y el Dr. Tabaré Vázquez. Es más, estoy convencido que sin Tabaré Vázquez el Frente Amplio no llegaba al Gobierno, si no hubiese aparecido en la década del 90 el Frente no llegaba; él tenía un discurso moderado y que permitía llegarle a Blancos, Colorados y frenteamplistas, eso fue clave, tenía presencia, firmeza, liderazgo dentro de la interna del Frente Amplio, alineaba todo el Frente Amplio, y hacia afuera tenía un discurso adaptado al siglo 21, a las realidades actuales.
-En otras ocasiones me ha hablado de la soberbia del Frente Amplio y si bien no había comunicado bien los logros, no había reconocido los errores.
-Sí, claro, exceso de confianza. Tabaré cuando dijo a Un Solo Uruguay «te espero en las urnas», fue una demostración de soberbia.
-Le recuerdo otra, cuando una señora le hizo una serie de recriminaciones él le respondió: «ya tuviste tus cinco minutos de fama», humilló a una supuesta votante del Frente Amplio. Saltamos de un Tabaré Vázquez, según Ud., que fue artífice del triunfo de haber llegado al Gobierno a un error que quizás fue el que le costó la derrota en las últimas elecciones.
-Y sí, es así. Yo no digo que fue la única razón, pero sí tuvo que ver. Creo que Tabaré tuvo ese enorme mérito, que sin él el Frente Amplio no llegaba, pero cometió errores, sobre todo en su segundo período de Gobierno, que fue muy distinto al primero. Además, la soberbia en cualquier ámbito de la vida, no es buena.
-¿Se considera un líder o un caudillo?
-Líder, porque creo que la diferencia entre en el líder y un caudillo, es que el líder tiene que convencer, argumentar, tener propuestas y en base a eso generar adhesiones, luego mantener esas adhesiones durante el tiempo con permanente iniciativas. El caudillo me parece que va más a los golpes.


“tener cercanía es prestar el oído, pero luego dar soluciones”


-Últimamente lo he escuchado hablar sobre una forma distinta de hacer política dentro del Frente Amplio, haciendo hincapié en la cercanía. ¿Qué es la cercanía para Ud.?
-La cercanía es prestar el oído, y después en función de ese prestar el oído, buscar soluciones, no es solamente escuchar, si lo dejamos en el escuchar solamente creo que todos podemos generar cercanía en ese sentido. La cercanía va más allá de eso, es tener la suficiente sensibilidad, interés y compromiso para que la propuesta que llega no quede solamente en ese oído que la escuchó, la cercanía tiene algunos elementos más.
-¿Y la gente se siente conforme? ¿Cree que va a cumplir?
-En algunos casos se puede cumplir, en otros casos no. La clave de la cercanía está en si se puede, sin duda genera credibilidad, si no se puede es bueno aclararlo, volver a ese mismo lugar y decir que no se puede explicando por qué.
-¿El Frente Amplio perdió esa cercanía con la gente?
-Sí, la perdió. Perdió sobre todo la respuesta, es decir, muchas veces solamente escuchaban por compromiso, no había devolución, y más en el último período del Frente Amplio. Uno quedaba de esa forma en una situación difícil, en el medio, el salteño que planteaba una inquietud y la indiferencia de quien podía resolverlo no hacía esfuerzo.
-¿Eso se circunscribe al Frente Amplio a nivel nacional?
-Supongo que estos procesos se dan en algún momento en todos los partidos, por eso el crecimiento que tienen y después bajan en un momento y vuelven a crecer. Me parece que va en esa cercanía que se pierde o la lectura incorrecta de la realidad que se hace o también en posturas soberbias de creer que uno tiene la razón y lo que llega desde otros lados no, no se analiza.
-¿Hay dirigentes frenteamplistas montevideanos que han logrado cargos electivos o políticos se creen con más derecho que los del interior?
-Sí, me pasó siendo diputado. Yo era diputado clase B, porque era del interior, lo viví durante cinco años. Creo que el centralismo es transversal a todos los partidos y a todos los lugares. El diputado de Montevideo cree que tiene un status superior al diputado del interior, el diputado del interior tiene un estilo distinto y ahí sin importar el color, sucede lo mismo.
-Se puede dar por el relacionamiento que tiene el diputado capitalino con el líder o las principales cabezas de cada partido.
-Eso por un lado y por otro, en la inmensa mayoría de los diputados de la capital, generalmente su campaña es publicitaria, a través de los medios de comunicación. En cambio en el interior, además de los medios de comunicación, hay mucho contacto con la gente.
-Hay diputados que han ganado una diputación con mucho menos votos que lo que logra un diputado del interior.
-Sí es cierto, generalmente por acuerdos. Van metidos en una lista, no hacen ni una sola actividad, se quedan en su casa toda la campaña y son electos diputados.
-¿Cómo se hace para derribar eso que ya está instalado?
-No es fácil, pero la pelea hay que darla y me parece que es de una sola manera, no hay otra, con una expresión electoral que tenga un peso fuerte en la estructura interna del Frente Amplio, pero también en aquellos ámbitos de poder y decisión. Cuánto más grande sea el movimiento, se supone que en las instancias electorales se tiene una presencia mayor, se podrá ocupar responsabilidades mayores y es la única forma de que te escuchen.
-En entrevista con CAMBIO Ud. dijo que en la elección local más que ganar el Frente Amplio la perdieron los partidos tradicionales y que a nivel nacional el Partido Nacional no la ganó, sino que la perdió el FA.  ¿Cómo cayeron esos dichos en los pesos pesados del Frente Amplio?
-Para mí simplemente es autocrítica, si uno no tiene autocrítica y no es consciente de los errores, es imposible soñar.
-¿Nunca le dijeron nada? ¿Nunca le llamaron la atención?
-No. Hasta el día del hoy nadie me llamó para decirme que estoy diciendo cosas fueras de lugar, es más, tengo la información que mis afirmaciones y otras que hice, generó dentro del Frente Amplio mucha adhesión. Creo que a veces se habla de autocrítica, pero no se animan a decir las cosas como en realidad son, y si las dicen lo hacen entre cuatro paredes donde hay 3 o 4 personas y solicitan que no se repita afuera. Eso es una postura que no favorece a nadie, o al menos a ningún partido político que realmente quiera aprender de sus errores, hay que decir las cosas como son, así como dirán cosas mías que no gustan o que consideren que no son correctas. Pero si no lo decimos y no lo hablamos va a ser ilícito.
-En un reportaje a La Diaria dijo que el Jefe de Policía de Salto habría dicho que sabía dónde se encontraban 150 “bocas” de droga. ¿Por qué cree que antes no se actuaba y ahora sí?
-Yo veo una actitud del Jefe de Policía actual (Carlos Ayuto) que no es la que tenía Oldemar Avero. Avero después de aquel encontronazo que tuvo con Un Solo Uruguay en la Ruta 3, en La Gaviota, desapareció, no brindó una sola entrevista a ningún medio, no dio la cara a nadie, no explicó nada a nadie y la policía se volvió pasiva. Bien o mal, hoy con Carlos Ayuto la actitud de la policía es otra, se puede compartir o no los procedimientos o la forma de actuar que tiene la policía, pero hoy la presencia policial es otra.
-Ahí hay una impronta suya, es muy difícil que los dirigentes frenteamplistas capitalinos reconozcan algo bueno que haga el Gobierno. Hace tiempo que lo escucho y no está en esa línea. ¿Eso no le lleva a un enfrentamiento con sus correligionarios? Usted es el único que habla bien del Gobierno en diferentes aspectos.
-Creo que si el Frente Amplio está pensando en volver al Gobierno Nacional tiene que reconocer lo que hizo mal, lo que está haciendo bien el Gobierno actual para así poder presentar propuestas mejores que las que tiene el actual Gobierno. Siempre he pensado que la campaña política es un momento donde las estructuras políticas deberían no preocuparse tanto por pegarle al otro o criticarlo, sino decir lo que se hará si toca conducir a Uruguay los próximos cinco años. Creo que cada vez más el uruguayo vota propuestas y candidatos, va dejando de lado el color y la estructura política. Si el Frente Amplio no se da cuenta que eso es así va a ser difícil, además de las propias características de la sociedad uruguaya, es una sociedad que en términos generales tiene estudios, entonces cuesta más, hay que entrar a base de propuestas, eso hay que entenderlo y por otro lado es una cuestión de credibilidad, si la coalición llegó al Gobierno Nacional con un poco más del 50% de los votos, por algo fue. Nosotros cometimos muchos errores, si hubiéramos hecho las cosas bien, no perdíamos.
-En lo local, cinco años de administración estuvo alejado de la mesa política, igualmente ganó la elección cómodamente. ¿Qué lectura hace de eso?
-Que es la gente la que decide, cada ciudadano. La mesa podrá decir una cosa y cada integrante de la vida política y pública de Salto da su punto de vista de cada tema actual, el salteño escucha y consume en general mucha política. Está informado, más allá de que hay sectores a los que no les interesa, pero hay una parte muy grande de la población salteña que le interesa la política y está informada, creo que en nuestro caso durante cinco años comunicamos bien. Si nosotros no hubiéramos comunicado bien lo que hicimos la cosa era distinta y para mí ese fue uno de los errores del Frente Amplio a nivel nacional, no comunicó o comunicó mal, no alcanza con hacer una buena gestión. He escuchado a otros integrantes del Frente Amplio de otros departamentos decir «se hicieron las cosas bien, pero perdimos», bueno, quizás no se comunicó bien.
-Ni bien había ganado la elección me dijo que en las próximas elecciones iba por el Senado y para los próximos 5 años iba por el premio mayor. ¿Se adelantaron los tiempos o continúa en el mismo esquema?
-Los objetivos son dos, que esta segunda intendencia sea mejor que la anterior y el segundo llegar al Parlamento, no como diputado, sino como senador.
-La elección nacional el Frente Amplio la perdió por poco, habiendo presentado la peor fórmula de la historia, eso es innegable. ¿Cómo visualiza la elección del 2024? ¿No ve que hay fragilidad en las futuras candidaturas del Frente Amplio y que Ud. se puede meter ahí?
-Creo no hay que apresurarse, las escaleras se suben escalón por escalón. Yo tuve Junta, dos diputaciones, dos intendencias, creo que la contribución que le puedo dar al Frente Amplio es desde el interior, fortaleciendo al partido desde lugares que están muy débiles.
-¿Aunque le pidan no puede haber un Andrés Lima candidato a la presidencia?
-No.


“lo que la coalición haga post pandemia será clave para las próximas elecciones”


-La coalición está para quedarse tanto a nivel nacional como departamental. ¿Adónde van a apuntar para rescatar votos? ¿Partido Colorado, Partido Nacional o Cabildo Abierto?
-Más que nada hoy lo que veo es que la pandemia está dejando detrás de si consecuencias sociales y laborales muy fuertes, el gran desafío que va a tener la coalición, cuando superemos la pandemia, que me imagino será este año o el otro cuando tengamos al 70 o 80% de la población vacunada, de ahí en más el Gobierno tendrá el gran desafío de solucionar el desastre social y económico que ésta pandemia generó. Si la coalición tiene la capacidad de recomponer la economía y que el uruguayo vuelva a mejorar su situación, va a llegar muy fortalecida a la elección. Si no lo logra el Frente Amplio tiene chances de pelear con muchas posibilidades la elección, la clave está en post pandemia, lo que la coalición haga en base al desastre que generó la pandemia tendrá mucho que ver, y creo que ese será el desafío de todos los gobiernos del mundo.
-¿Es un error del Frente Amplio como oposición criticar al Gobierno Nacional como si este desastre que estamos viviendo fuera exclusivo del Uruguay?
-Esto es algo que está pasando a nivel mundial, uno mira las economías de todos los países del mundo y están en crisis, los tiempos que se vienen van a ser complicados. Me parece que sí, están criticando en un momento donde tenemos que hacer todo lo contrario, hay que ayudar al Gobierno a que la pandemia no crezca, hoy tenemos casi 800 casos en Salto, yo no quiero que crezcan los casos, al contrario, quiero que los casos disminuyan, que hayan más vacunatorios, que aumente el porcentaje de vacunación, que podamos salir cuanto antes. Si se interpreta que eso es ayudar al Gobierno Nacional, bueno, lo estaré haciendo, pero yo quiero que la pandemia no siga avanzando.
-¿Esa es la crítica que le hacen los montevideanos?
-Quizás algún dirigente podrá pensarlo, pero no escuché eso, a mí no me lo dicen. Al contrario, me parece que el Frente Amplio está esperando este tipo de actitudes maduras, acorde a la situación que atravesamos. La preocupación hoy es la pandemia, vivir, tener salud, y están enfocando mal.


Felipe Carballo cometió un gran error pidiendo la
renuncia de Salinas


¿Cómo le cayó que Rafael  Michelini dijera que iban a aglomerarse si no modifican plazos para juntar firmas contra la LUC y que Felipe Carballo pidiera la renuncia del Ministro Salinas?
-En ambos casos el FA se desmarcó inmediatamente. En el caso de Felipe Carballo pidiendo la renuncia de Salinas, cometió un gran error, fueron expresiones no acertadas, desconocen la preocupación que hoy tiene la población. Por suerte el Frente Amplio se desmarcó al instante con el pedido de renuncia de Salinas, Felipe Carballo quedó solo. Éste es un momento para estar juntos, sin importar las diferencias y dificultades, si en pandemia no nos juntamos para salir juntos… ¿Cuándo lo vamos a hacer? Es un momento realmente difícil, hay que tener la capacidad de trabajar juntos. Querer que al Gobierno Nacional le vaya mal es algo muy errado, son posturas que desprestigian la actividad política y llevan a que la gente diga que no quiere saber más de política.