Por Mario Sancristóbal
Para muchos de aquellos que alguna vez hemos escrito o que escribimos de manera asidua, han sido fundamentales las enseñanzas de personas que nos ha marcado en nuestra formación y no se trata solamente de quienes ha sido nuestros maestros o profesores sino de esas personas que a través de privilegiarnos con la amistad han generado un sentimiento de respeto hacia esa profesión tan noble como la docencia. Por eso, se hace sencillo y complejo a la vez, destacar valores y aptitudes de esas maestras de la vida que además de las enseñanzas, nos han dado lecciones, en más de una oportunidad, de cómo deberíamos conducirnos a lo largo del camino que hemos transitado.
“LA EDUCACIÓN CAMBIA A LAS PERSONAS”
En oportunidad de celebrar el Día del Maestro CAMBIO mantuvo contacto con Elba Ancellotti de Russo, María Russo y Ana Russo, madre y sus dos hijas, las tres maestras y a quienes les preguntamos sensaciones por desarrollar esta actividad. “En nuestra familia la vocación por ser docente ha pasado con mucha felicidad de generación en generación. Siempre hemos tenido presente en nuestro quehacer diario las palabras de Paulo Freire que dice: “La Educación no cambia al mundo, cambia a las personas que van a cambiar el mundo” y a lo largo de los años de carrera que hemos transitado ese fue, es y será el compromiso que asumimos con la sociedad en la que vivimos. Siempre con la sinceridad y el trabajo como herramientas para poder formar a quienes serán los hombres y mujeres del mañana, esta profesión nos ha dado enormes muestras de cariño y es por eso que la defenderemos siempre, comprometidos con la actividad en cada lugar en la que la hemos desarrollado y defendiendo esto que consideramos tan vital, que es la educación”.
