viernes 29 de marzo, 2024
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La columna infiltrada: El consejo de Jorge Batlle a Jiang Zemin

Mediante una entrevista realizada por Orlando Petinatti en su programa “Malos pensamientos”, el dirigente del Partido Nacional, Gustavo Penadés, narró una anécdota del Presidente Jorge Batlle cuando en ejercicio de su mandato recibió en Uruguay al presidente de la República Popular de China, Jiang Zemin.
ANÉCDOTA
“El era muy amigo de mi abuelo y conocía mucho a mi familia”, comenzó expresando Penadés. “Cuando yo era presidente de la Cámara, un día llega el Presidente de China, Jiang Zemin, al Uruguay y estábamos en Casa de Gobierno sentados en la vieja mesa del Consejo de Ministros con los traductores chinos que nos hablaban en inglés. De repente Batlle le empieza a hablar al chino (Jiang Zemin) en alemán y lo increíble fue que el chino le empezó a contestar también en alemán. Batlle sabía que el chino era profesor de este idioma en China y se pasaron media hora hablando los dos en alemán y todos los demás mirándonos, porque el traductor que había era del chino al inglés y del inglés al español. Pero lo más gracioso fue que en la cena cuando el presidente chino le dice: “usted sabe presidente Batlle que tengo problemas para hablar con el presidente George Bush” y Batlle le responde: “hable con Bush padre, ese va a ser el mejor canal, de padre a hijo”, sabiendo además que Bush padre había sido embajador en China. Al poco tiempo Batlle me invita a ir con él a Nueva York a la Asamblea General de las Naciones Unidas. Llegamos a la asamblea y de repente viene Bush (hijo) que le tocaba hablar en el evento, se le acerca a Batlle y le dice: “Presidente Batlle le tengo que agradecer algo. Usted le dio un consejo al Presidente de China y funcionó. El presidente de China habló con mi padre y logramos establecer un diálogo entre China y EE.UU y se lo queremos agradecer a usted, porque usted fue el de la idea”.
DELIRIOS
En plena Guerra Mundial, el embajador británico en Washington, lord Lothian, denunció al Secretario de Estado Cordell Hull, que en Uruguay, clave de entrda del Ró de la Plata, grupos nazis estában planificando tomar el poder con el apoyo del vice-presidente colorado César Charlone, y el senador nacionalista Luis Alberto de Herrera. Nada era cierto y los infundios nacían en el estado nervioso de los gobiernos que estaban perdiendo la guerra. Curiosamente, el 7 de junio de 1940, una Comisión investigadora de actividades antinazis, hizo allanar la casa de un fotógrafo alemán radicado en Salto, de apellido Furhmann, y allí se encontraron documentaciones y planos que parecían indicar un ataque al país. El Juez lo procesó, pero escribió en el fallo que a su entender “se trataba de un desequilibrado inimputable”. Furhmann también tenía planeado invadir la luna.
La otra juventud
La JUP (Juventud Uruguaya de Pie) fue una organización estudiantil que empezó a hacerse oír en octubre de 1970; había nacido en Salto, como una oposición a las tradicionales fuerzas estudiantiles rebeldes de izquierda. Se apoyaba en los sectores más conservadores de los partidos tradicionales y su ideario, más que neo fascista como se le achacaba desde tiendas adversarias, era decididamente anti marxista. En un momento político en el que las calumnias y los embustes eran utilizados como armas, también se dijo que recibía dinero y armas de la dictadura brasileña. Aunque esto nunca se probó, es cierto que disponía de cierta holgura económica que le permitía tener una audición diaria por radio rural a las 9 de la noche, la hora más codiciada. La JUP tuvo participación activa en múltiples enfrentamientos estudiantiles y su cabeza visible era Hugo Manini, hoy importante dirigente de los empresarios arroceros. (Actual director del Semanario La Mañana). La JUP desapareció al llegar la dictadura.