lunes 7 de julio, 2025
  • 8 am

Curiosidades de nuestros perros

Armando Guglielmone.
Adiestrador canino, educador etólogo.
Especialista en problemas de conducta.
Contacto: 098 539 682
¿Por qué los perros comen hierba?
Existen varias explicaciones para esta conducta. La primera sería la necesidad de ciertos nutrientes o vitaminas que el perro no encuentra en su dieta. En la naturaleza los lobos ingieren junto con las vísceras de las presas cazadas el contenido de estas; si tenemos en cuenta que la mayoría de estas presas son herbívoras ahí tenemos una ingesta natural de vegetales. En el perro doméstico aparecen conductas que son reminiscencias de su pasado salvaje. Otra explicación quizá más probable es que ingieren algunas hierbas con efecto emético, es decir para provocar el vómito. Esto parece demostrarlo el hecho de que ante afecciones digestivas se observa esta conducta con mucha más frecuencia.
¿Por qué los perros se arrastran a veces tras defecar?
Cuando un perro arrastra su “trasero” tras hacer sus necesidades nos indica que existe algo que le molesta y que trata de eliminar. Se pensó en un principio que esta conducta podía tener algo que ver con el marcaje territorial pero ha sido desechado. Las razones son mucho más pragmáticas y se debe siempre a algo que les produzca molestias como son algunos parásitos que al ser expulsados originan un fuerte prurito anal, restos de heces que quedan pegadas en esa región en los perros con pelo largo y principalmente, tanto por su frecuencia como por su importancia, las afecciones de las “glándulas perianales”. Estas glándulas son dos órganos pequeños situadas a los lados del ano y con misión de marcaje territorial, al producir una secreción de fuerte olor. Las alteraciones de estas glándulas son muy molestas pudiendo ir desde un simple llenado hasta la aparición de infecciones o tumores.
¿A qué se debe el comportamiento sexual canino tan complejo?
Podemos comprobar cómo los perros intentan “montar” a las piernas de personas, a otro macho o incluso un almohadón o peluche. Las perras en celo con mucha frecuencia no dejan que el macho las monte. Muchos machos ante una perra en celo no saben como comportarse ignorándola o intentando montarla por cualquier sitio. Durante el “cortejo” parece que macho y hembra se pelean. Tras la monta macho y hembra quedan unidos durante bastantes minutos.
¿Por qué estas conductas?
Primero que nada, la hembra es receptiva al macho durante dos cortos períodos al año, mientras el macho lo es todo el año. Ante el olor de una perra en celo en la zona se produce un estado de excitación en todos los machos. En la naturaleza las pautas de comportamiento se aprenden durante la convivencia del cachorro en la manada; desde muy joven descubrirá que intentar montar a un macho, o a una hembra que no esté en celo es seguido de un fuerte castigo. Las hembras se acostumbrarán al contacto con otros miembros de su especie, aceptándolos después de una forma natural en el momento de la cópula. En nuestros perros es muy importante que durante su desarrollo tengan contacto con otros individuos de su especie para que aprendan, en la medida de lo posible, a relacionarse en el futuro con otros perros. El otro aspecto curioso de quedarse “enganchados” se produce debido a que el perro posee en el pene los llamados “bulbos” que son unas estructuras que se hinchan y quedan bloqueadas. Estos minutos unidos macho y hembra permiten que la inseminación tan larga del perro sea realizada por completo y aumente las posibilidades de gravidez.
¿A qué es debido que los perros se revuelquen en inmundicias?
Este comportamiento sería para enmascarar su propio olor y pasar desapercibido tanto como autodefensa frente a sus enemigos, como en el momento de la caza para no ser detectado por las presas. Otra teoría explica que el animal salvaje al impregnarse en el olor a carroña intentaría comunicar con ello a los demás integrantes de la manada que ha encontrado algo que comer. Una última explicación apuntaría a que ya que los perros viven en un “mundo de olores”, ese mayor olor reforzaría su estatus frente a los integrantes de su grupo o ante el enfrentamiento con otros perros. (De igual forma sucede al liberar el contenido de las glándulas perianales en el transcurso de una pelea).
¿Por qué existen tantas razas de perros?
Es curioso que animales tan opuestos como un pequinés y un galgo pertenezcan a la misma especie canina. ¿Por qué existen razas con patas tan cortas, tan pequeñas, gigantes, de orejas largas, etc.? Algunas características son resultado de la casualidad, otros aspectos son fruto de una selección en una línea determinada. Las orejas caídas fueron preferidas por el hombre en su proceso de domesticación pues son propias de animales sumisos, o cachorros, también en algunos perros de rastro o caza (sabuesos) pues parece que se concentran mejor en seguir los rastros. Las razas enanas se prefieren como animales de compañía, los perros de patas cortas tienen su origen en los perros de madriguera, los galgos, de gran tamaño, podían correr con eficacia tras las presas o los mastines, defender con suma eficacia. Al ser el perro un animal tan moldeable ha permitido a través de selección genética, de animales adaptados a todos los medios y trabajos.
El número de preguntas que surgen de la convivencia con el perro podrían ser interminables, ojala este artículo haya servido de respuesta a algunas de tantas preguntas que a diario nos planteamos.