Todos los años se producen accidentes en los ríos o en piscinas privadas con consecuencias, a veces, graves como ahogamientos o traumatismos severos. Por ello es importante seguir una serie de recomendaciones para evitarlos. La mayor parte de los accidentes acuáticos se pueden evitar, por esa razón se aconseja extremar las precauciones para prevenir ahogamientos y lesiones graves en la playa o piscina.
RECOMENDACIONES
-Asegurarse que la piscina cumple con las medidas de seguridad necesarias para toda la familia. Por ejemplo, si es posible que tenga cercado perimetral para que los pequeños no puedan acceder libremente.
-Vigilancia permanente a los niños en todo momento. No delegar esta responsabilidad a otro niño mayor.
-En caso de no sabes nadar utilizar siempre un chaleco salvavidas para bañarse. Los flotadores hinchables no son recomendables.
-Es recomendable bañarse siempre acompañado, sobre todo si se trata de una persona mayor o si se padece algún problema de salud.
-El consumo de alcohol antes del baño disminuye la capacidad de reacción ante un peligro y puede propiciar conductas que ponen en riesgo la salud.
-Salir enseguida del agua si se encuentra cansado o con frío.
El ahogamiento se produce de forma rápida y silenciosa, la mayoría de las veces la víctima se perdió de vista solo unos minutos. Muchos ahogamientos se producen en el entorno familiar: un bebé puede ahogarse en sólo 30 centímetros de profundidad.
