viernes 26 de abril, 2024
  • 8 am

Los perros de Armando: Cuidado con la naturaleza

Armando Guglielmone Educador canino – Instructor etólogo Representante de Ovejeros Alemanes Von Schutzmann Contacto: 098 539 682
En nuestro país no contamos mayormente con depredadores que puedan ser peligrosos para la vida de nuestros perros pero sí que hay animales que pueden atentar contra su vida poniéndola en grave riesgo. De unos años a ahora cada vez es más frecuente que ocurran mordeduras de serpientes a mascotas, especialmente perros y no habló del medio rural exclusivamente donde se pensaría que es el lugar ideal para que esto ocurra. En nuestra ciudad, a medida que la gente empieza a vivir cada vez más hacia afuera de la misma es frecuente encontrarse con serpientes ponzoñosas de alto riesgo, sobre todo para nuestros perros ya que la curiosidad propia de estos hace que se produzcan estos acercamientos muchas veces fatales. Basta ir por la zona del Ayuí o Arenitas Blancas por poner dos ejemplos para poder encontrarse con estos ofidios peligrosos, yaras o cruceras que han ocasionado la muerte de infortunados perros. Si lo agarramos a tiempo las probabilidades de salvarlo mediante suero antiofídico son grandes aunque a veces pueden quedar secuelas. Debemos procurar mantener el terreno limpio y procurar que los aledaños también lo estén si no lo único que hacemos es alejar un poco la probabilidad de encuentro, eliminar roedores que son la mayor fuente de alimentación de estos reptiles y por supuesto, no ser sucios, la basura es lo que atrae a ratas y ratones a nosotros. Hay otros animales que por ser menos frecuentes sus ataques no revisten menor gravedad pero hay que cuidarse igual, las abejas o avispas pueden reaccionar agresivamente si las perturba algo, una picadura normalmente se soluciona rápido pero si el ataque es en enjambre se complicará. Debemos tener cuidado cuando tengamos a nuestro perro en un lugar cercano a estos insectos, procuremos si son abejas que vengan a sacarlas las personas que saben de su manipulación, nunca matarlas y si son avispas podemos hacer fumigar para eliminarlas. Hace unos cuantos años en la zona cercana al club de polo alguien tenía su perro atado a un árbol y aparentemente el ladrido constante perturbó a las avispas que se encontraban por encima y propiciaron el ataque que acabó con la vida del pobre animal, estas son las cosas que no podemos hacer.
Muchísimo menos frecuente pero que se puede dar cuando vamos al campo son encontrarnos con los gusanos de la procesionaria, estos se desplazan como una masa de cientos de ellos arrastrándose en una suerte de entrevero que a lo lejos parece una sola cosa. Si un perro es picado puede provocar necrosis siendo particularmente peligroso en la lengua. Y el más singular pero que también ocurre sería a mi entender el de los puerco espines, la primera vez que vi un perro afectado por ir a molestar a uno fue cuando hace muchos años trabajando en la veterinaria de un amigo unos cazadores trajeron un perro que parecía un alfiletero el pobre animal, hubo que sedarlo para luego sacar una a una las púas que tenía hasta en el paladar.
Procuremos ser precavidos con estos animales y podremos ahorrarnos pasar un mal momento, nosotros y nuestros perros.