El jinete, el terapeuta y el caballo: un vínculo donde se genera lo esencial y los avances en la equinoterapia

Por Melisa Ferradini
Valeria Jaureguiberry es Directora del Centro Equinoterapia Nº17. Se formó como Docente en Secundaria hace unos 15 años, profesión que aún continúa ejerciendo. Hace ya algunos años ha comenzado la búsqueda de dedicarse a lo que siempre le apasionó, que son los caballos y la naturaleza en sí. Ha realizado diferentes formaciones en relación a ellos y el coaching y descubrió un mundo nuevo lleno de posibilidades. En la búsqueda de poder poner en práctica todo lo que aprendió, se volvió a encontrar con Susana Gruning quien dirigía el Centro de Equinoterapia en Salto. Comenzó como voluntaria y poco a poco fue introduciéndose en las actividades que implicaban las terapias con caballos que allí realizaban. En la actualidad continua aprendiendo sobre equinoterapia, sobre discapacidad, en forma autónoma, hasta que las circunstancias hicieron que tuviera que ocupar el cargo de Directora. En diálogo con CAMBIO la Directora nos relata el loable y enriquecedor del trabajo que realizan con las personas interactuando y relacionándose con los caballos.
-¿Qué es y cómo funciona el Centro?
-El Centro se encuentra ubicado en el predio de Deportivo Artigas y funciona de lunes a viernes, por la mañana y la tarde. Las sesiones se realizan en forma individual o grupal según las necesidades de los usuarios, y tienen una duración de 45 minutos. Los padres o tutores acompañan a los niños o jóvenes y muchas veces desean quedarse para disfrutar del entorno. Es importante destacar que contamos con un convenio con el Banco de Previsión Social para que tengan la oportunidad de acceder a la terapia en forma gratuita, para aquellos que presenten alguna discapacidad física, intelectual o emocional. No obstante, también tenemos cupos para aquellos que sólo deseen aprender a generar un vínculo con el caballo o aprender a montar. La edad con la que comenzamos a trabajar es a partir de los 3 años, por cuestiones de formación ósea.
-¿En qué consiste y que es la técnica de equinoterapia?
-La equinoterapia es un conjunto de técnicas que apuntan a la rehabilitación de una persona con discapacidad. Busca derribar barreras que le impidan poder formar parte de la sociedad, ayudando desde distintas áreas, ya sea desde el lenguaje, lo físico, lo emocional, lo social, etc. El plus de estas terapias son los caballos y los aportes que ellos hacen con sus características etológicas. El caballo es un co-terapeuta pero aunque por sí mismo es capaz de armonizar el ambiente para que la persona se relaje y disfrute, no es suficiente para producir cambios en los usuarios, es imprescindible la participación del terapeuta que es quien dirige las actividades específicas que cada usuario necesita. En esa tríada el jinete, terapeuta, caballo es donde se genera lo esencial y se avanza hacia el logro de objetivos.
-¿Cómo lleva adelante la dirección y como está conformado el equipo de trabajo?
-Fue para mí todo un desafío comenzar este rol, una salida de mi zona de confort, encontrarme dirigiendo y organizando actividades, que si bien en la docencia estamos acostumbrados, es diferente cuando lo haces con tus pares. Pero gracias al hermoso equipo de trabajo que tenemos, fue muy gratificante, rescato el buen humor y el buen clima de trabajo que se genera allí. No es como ir a trabajar, es como ir a divertirse, y eso creo que es fundamental para que las cosas funcionen. Los caballos tienen mucho que ver en esto, a veces venís cansada o con algún que otro conflicto interno, y ellos te traen al presente, te olvidas de todo lo malo. Para mí son mi cable a tierra. Nuestro equipo está formado por un grupo de terapeutas, instructores y ayudantes de monta. Contamos con Belén Amaro (Fisioterapeuta), Antonella Blanc (Equinoterapeuta), Valentina Trindade (Psicóloga), Cecilia Suarez (Educadora en Primera infancia). Luego pero no menos importantes tenemos a José Mutuberria que es quien se encarga de que todos nuestros caballos se encuentren en buen estado, los prepara y los cuida; Dahiana Zamit, Yuliana Cavallo, Lourdes Rodríguez y Valeria Postiglione que trabajan como ayudantes de monta y guías. También tenemos en nuestro equipo al Doctor Fernando Menoni como Director Técnico quien colabora en forma honoraria con nosotros y a la Dra. Veterinaria Victoria Camacho para controlar la sanidad de nuestros equinos. El Centro cuenta con el respaldo legal de la Asociación Civil Unidos, sin fines de lucro, conformada por padres que apoyan las actividades y nos ayudan a que esto pueda funcionar.
-¿Qué tipos de capacidades diferentes se atienden?
-Tenemos diversos casos niños con trastorno del espectro autista, trastornos del lenguaje, con síndrome Down, retraso intelectual, parálisis cerebral, ACV Parapléjica, Encefalopatías. También con ansiedad, hiperactividad, y otros problemas emocionales. Las edades van desde los 3 años hasta los 40 aproximadamente.
-¿Cuáles son las actividades fundamentales de la función del caballo?
La equinoterapia no es montar a caballo. Creo que ese es un concepto que hay que desterrar. Si bien el caballo tiene muchos beneficios es el conjunto de técnicas que se utilizan con él, lo que hace al éxito de la terapia. Muchas veces no es necesario montar el caballo, podemos trabajar los objetivos desde abajo, realizando actividades de educación, cuidado, alimentación. El solo hecho de pararse al lado de un caballo ya nos genera bienestar. Esto sucede gracias a la coherencia cardíaca que ellos gestionan muy bien y nos llevan a que podamos ingresar a su entorno. Sin entrar a profundizar en el tema, la coherencia cardíaca tiene que ver con un tema de energías, vibraciones y estar en el presente. Por otro lado, los beneficios que nos brindan cuando los montamos son 3 principalmente, transmisión de la marcha tridimensional similar a la humana, transmisión del calor corporal y transmisión de los impulsos rítmicos al cinturón pélvico. Estos tres principios tienen gran importancia en el área psicoafectiva y pedagógica porque desarrollan en el ser humano cualidades socio integrativas como la comunicación análoga (no verbal), el sentido de responsabilidad, la tolerancia y la paciencia, lo que promueve cada vez más la integración de la equinoterapia al área educativa, especialmente en la educación especial. Entonces podemos realizar un sinfín de actividades que incluya al caballo para que el usuario pueda aprender y mejorar su calidad de vida.
-Nos podría contar la actitud de los participantes al comenzar el taller y al transcurrir del mismo, ¿se aprecia el cambio?
-Cuando los usuarios llegan al Centro vienen con muchas expectativas de sus padres sobre todo, ellos vienen con la intención de andar a caballo, en algunos casos no quieren ni acercarse al principio, les genera mucho miedo, pero poco a poco van ganando confianza y luego disfrutan de la actividad. En otros casos llegan con mucha ansiedad por subir, y se van súper tranquilos, cuando no, quieren seguir estirando el tiempo de la sesión. Los avances en algunos casos son muy notorios, hasta fuera del ámbito de la equinoterapia, les permite gestionar el autocontrol muchas veces.