Por Andrés Torterola
En abril de este año, se produjo un violento copamiento en un comercio ubicado en la calle Solís, entre Florida y Colonia, en Pueblo Belén. Un hombre de 60 años, propietario del local, resultó con un golpe en la cabeza. Uno de sus hijos, de 26 años, sufrió una herida de bala en una pierna, mientras que otro hijo, de 33 años, ya había sido trasladado para recibir atención médica debido a una lesión similar en una de sus extremidades. Según informes de la policía, cuatro individuos encapuchados, armados con pistolas, llegaron al local en un vehículo. Tras apuntar con un arma al propietario, irrumpieron en el comercio, mientras un quinto integrante del grupo permanecía al volante del vehículo. Los delincuentes robaron 80.000 dólares estadounidenses y un teléfono celular antes de darse a la fuga.
SIN INFORMACIÓN
Cuatro meses después del incidente, CAMBIO entrevistó a uno de los familiares para conocer de primera mano los avances en la investigación. La respuesta fue que, hasta el momento, no se ha obtenido ninguna información relevante. Además, el familiar expresó preocupación e indignación, ya que los efectivos policiales a cargo de la investigación proporcionaron un número de contacto a las víctimas, pero no responden a las llamadas. El entrevistado informó que tanto su padre como uno de sus hermanos se encuentran en buen estado de salud, aunque el hermano que fue herido en una pierna con un arma de fuego aún necesita usar muletas para caminar. También mencionó que los contactos telefónicos que posee son de la policía técnica, quienes recopilaron información en el lugar del hecho, incluyendo casquillos de bala, pero después de eso no se ha recibido ninguna actualización.
“SE LAVAN
LAS MANOS”
“Les he estado escribiendo, pero no obtengo respuesta”, dijo el familiar. “Los policías dijeron que se comunicarían conmigo, pero luego dejaron de responder. No quiero que este acto de violencia quede impune”. En algún momento se mencionó un vehículo brasileño que se dirigía hacia la ciudad de Artigas. En el atraco participaron cinco personas: el conductor permaneció en el auto, mientras que cuatro individuos entraron al comercio. La familia estuvo a punto de ser asesinada, les robaron una gran suma de dinero, y parece que la investigación no avanzó. Con frecuencia, la policía dice «no podemos hacer nada», y con eso se lavan las manos. “Al principio, los policías informaron a la familia que la línea de investigación era sólida y que ya tenían las pruebas necesarias, pero posteriormente hubo una orden de la Fiscalía para detener la investigación”, indicó el familiar. También se informó que el auto utilizado en el robo fue visto circulando en Artigas y que luego fue puesto a la venta.
JUNTO CON BRASIL
En las averiguaciones con la Policía de Salto se ha manifestado que se siguen algunas líneas de investigación y se pidió en su momento ayuda a la Policía de Brasil, teniendo en cuenta que se presumía que los asaltantes habían viajado hacia Artigas y cruzado al lado brasilero. Pero hasta el momento no hay ninguna información –al menos que se pueda saber públicamente- acerca de este hecho.
