Desarrollo de remates judiciales según Pablo Alexis Teixeira: variables de valores y demandas
En entrevista con CAMBIO, el rematador Pablo Alexis Teixeira, brindó información sobre cómo se vienen desarrollando sus remates y la manera en el que hoy en día se vende. Teixeira realiza remates judiciales como su fuerte, bienes inmuebles, casas, autos y otros artículos.
VALORES DE INMUEBLES
Teixeira dijo que en remates de inmuebles, se obtiene un 30% debajo del valor de lo que sería ese mismo inmueble en el mercado particular. “Los remates judiciales tienen distintos aspectos, se deposita la seña el día del remate y a los 60 días aproximadamente se debe pagar el saldo, eso serían ventas contado que por lo general a nivel inmobiliario se tienen otros plazos que lo hacen más fácil para el comprador en cuanto a plazos, y eso conspira en el valor a obtener en un remate judicial” destacó. “El valor depende del bien, cuando el bien se destaca, cuando es bueno, el valor es bueno, es decir, las cosas buenas se pagan bien, eso siempre ha sido así y seguramente seguirá siéndolo, inmuebles destacados ya sea por su ubicación o calidad de construcción, metraje, por lo que sea, si se destaca, se paga bien” añadió y siguió “después hay otros tipos de inmuebles que sirven para el inversionista que anda buscando obtener una renta, esos se pagan un poco más barato de lo que sería un negocio particular, nosotros los rematadores a veces armamos una expectativa cuando vamos a vender una casa, un terreno o un campo, y después ves que se obtiene un valor mayor, o puede ser menor también”.
DEMANDA
Siguiendo con las variables de valores del objeto a rematar que se pueden obtener, Teixeira apuntó que el valor también depende de la demanda, de lo que la gente esté buscando. “Eso va de la mano también en obtener el mejor precio, hay otros motivos que inciden como una buena publicidad, mostrar bien el artículo, pero la demanda influye mucho, calidad de gente, cantidad de gente, que muchas veces la cantidad de gente no hace la calidad, a veces hay 100 personas en un remate y son solo dos los que están haciendo el valor del remate” expresó. “Los remates judicial son sin base, solo con el hecho de ser sin base llama la atención, cada uno de los participantes tiene la ilusión de comprar lo más barato posible, el rematador se encuentra en la vereda de enfrente porque quiere vender lo más caro posible, hay remates en donde hay 50 o 100 personas, remates en donde concurren 300 personas, depende del artículo a rematar también, hay personas que en el segundo pique ven que el objeto es muy cotizado y se van porque querían comprar barato, es todo muy variable, lo principal en un remate es que haya dos o más personas que se peleen, en el buen sentido de la palabra, que pujen por ese bien que se remata para obtenerlo, Salto es una ciudad que tiene muchos remates judiciales, tenemos una población similar a la de Paysandú y sin embargo, en Salto se remata muchísimo más, hay épocas también, se venden cosas muy baratas en algunas épocas y luego no podes creer los valores actuales” finalizó.