domingo 22 de septiembre, 2024
  • 8 am

“Es necesario que haya docentes hombres y mujeres, los dos cumplen una gran función”

El Maestro Jorge Molina, dicta clases en la Escuela Nº 97, que cuenta con niños con discapacidad. Eligió la carrera “por accidente”, debido a que le gustaba la carrera de profesorado, le gusta mucho la literatura y la historia, cuando fue a inscribirse para formación docente, se enteró que para hacer profesorado se debían dar varias materias libres en Montevideo, y eso no le gustó. Decidió probar con magisterio, y la comenzó. “Empecé magisterio un poco indeciso, y todo cambió cuando comencé a hacer algunas prácticas de presión se llaman, había que preparar clases con compañeros y dar clases de distintos temas, ahí fue cuando descubrí mi vocación, me gustaba trabajar en las escuelas dando clases y esto es lo que quiero hacer, estar en contacto con los niños”.
ROL DEL MAESTRO EN LAS AULAS
Consultado por el rol del maestro en las clases, dijo que es muy importante que se puedan ver maestras y maestros en las escuelas. “Se habla mucho de que el hombre marca más límites en las aulas, pero creo que los dos cumplen el mismo rol, y que se haya incorporado el hombre en la carrera de magisterio suma mucho, en mi caso yo trabajo en la Escuela Especial 97, allí los maestros comienzan como con pena, de ver a niños con discapacidades, pero eso abarca solamente el aprendizaje, en cuanto al comportamiento y actitudes, se deben poner límites de todas formas y enseñar a ser personas, el niño exige límite en todos los ámbitos, ellos te prueban, van viendo hasta donde llegan y es necesario poner límites, es parte del rol del docente, eso comienza en la casa y sigue en el aula” expresó. “Es necesario que haya docentes hombres y mujeres, los dos cumplen una gran función” agregó.
ARMONÍA EN CLASE
Además, Molina comentó que cuando era practicante, hacía recorridas por varias escuelas y cuando llegó a la Escuela 97, fue como un amor a primera vista, se dio cuenta que le encantaría trabajar allí, y lo hace desde hace 18 años desde que tuvo la oportunidad, se siente muy cómodo y piensa que no podría trabajar en otra escuela. En su clase, trata de que haya armonía, que los niños se lleven bien. “Me recibí hace 27 años y trabajo ejerciendo la profesión desde hace 26 años, en este Día del Maestro, quisiera decirle a los nuevos docentes que la práctica hace al docente, uno siempre cuando termina la carrera, supuestamente estás preparado para dar clases, pero el primer día de clases, uno se da cuenta que le falta mucho y que se va haciendo en la práctica, trabajando y con el paso del tiempo, la teoría es una cosa, y la práctica es otra, a los nuevos docentes hay que hacerles saber que no hay que bajar los brazos y que muchas veces van a sentir ganas de abandonar, eso es normal, hay que seguir porque si hasta ahí llegaron, es porque les gusta la carrera, y vale la pena, se dice mucho que los docentes no están muy bien pagos económicamente, pero ese trato con los niños y verlos crecer, encontrarlos cuando son adultos y que te recuerden como el maestro que fuiste y tus características, eso es impagable, eso es una importante recompensa” finalizó.