martes 5 de noviembre, 2024
  • 8 am

Estancia La Aurora

Minervine

La devoción que despierta el Padre Pío en las personas, es un sentimiento digno de ser admirado, porque congrega entorno a su imagen tanto a católicos como a fieles de otras religiones que encuentran espiritualmente las respuestas que están buscando. Cada 23 de septiembre (fecha del fallecimiento del Padre Pío), miles de personas se congregan en su gruta de estancia La Aurora para caminar en oración y celebrar la eucaristía frente a su imagen. A ella llegan salteños, uruguayos de todo el país, argentinos y de otras partes del mundo, atraído por los milagros que se han difundido, pero sobre todo por la paz que genera el entorno de la gruta y los pedidos concedido por el Santo.
CAMINO DE LA CRUZ
El último Vía Crucis que se realizó en La Aurora fue multitudinario. Devotos de todas las edades se reunieron en un peregrinar en silencio hasta la gruta donde se celebró la misa presidida por Mons. Arturo Fajardo. Pero al margen de esta celebración especial que también se repite el 25 de mayo (fecha de su nacimiento), el Santo reúne a diario a cientos de devotos que han experimentado el poder de la curación, la paz interior y la calma espiritual, mediante la oración y la presencia en la gruta que los fortalece en su devoción. La gruta en La Aurora es uno de los sitios religiosas que más gente atrae durante todo el año, incluso a través de jornadas de meditación y reflexión de grupos religiosos.
TRASCIENDE RELIGIONES
El fenómeno Padre Pío no solo atrae católicos, sino, a personas de todas las Iglesias e incluso ateos. Hay personas que visitan la gruta que nunca han ido a la Iglesia, sin embargo, ya sea por curiosidad o porque alguna vez le rezaron, hoy son fervientes devotos del Santo. En su gruta se congregan de muchas religiones que encuentran en San Pio de Pietrelcina una esperanza que enciende la fe y los acerca Dios.