Desde Argentina y Uruguay han puesto en duda que sus selecciones sub 20 que van a disputar el Sudamericano en Venezuela, puedan viajar con garantías, y evaluan no presentarse si hay cambio de sede.
Ayer el Gobierno uruguayo confirmó que va a pedir el cambio, mientras evalúa junto a otros gobiernos de la región, las medidas a seguir.
La Confederación Sudamericana (Conmebol) se adelantó a dar garantías a las federaciones afiliadas, por jugar en un país acusado de ser antidemocrático y de manipular las últimas elecciones por parte del presidente Nicolás Maduro.
Patricia Bullrich, ministra de Seguridad de Argentina, dijo que su país “no va a mandar a chicos que los puedan secuestrar. ¿Nuestra selección Sub-20, el 23, puede ir a Venezuela? ¿No los pueden tomar de rehenes?”, se preguntó en una entrevista con CNN Radio”.
Argentina mantiene un conflicto diplomático con el gobierno de Maduro por la detención del gendarme Nahuel Gallo hace un mes, cuando ingresó a Venezuela y fue detenido, acusado de espionaje y terrorismo.
Mientras los gobiernos de Uruguay y Argentina ya se han pronunciado, en AUF y AFA no tienen información oficial sobre la posible no presentación de sus equipos.
El campeonato, que primero se iba a disputar en Perú pero se pasó para Venezuela luego del arresto de Agustín Lozano, presidente de la Federación Peruana, por lavado de activos y fraude.
El torneo se iniciará el 23 de enero y finalizará el 16 de febrero. Clasificará a cuatro equipos al Mundial de la categoría.
Si llegara a concretarse el cambio de sede, la principal alternativa sería Chile, que albergará el Mundial Sub 20 a disputarse del 27 de septiembre al 19 de octubre. En consecuencia, cuenta con la logística y las instalaciones adaptadas por el evento próximo y reglamentariamente nada le impide cobijar ambas competencias.
