
Dese Salud e Higiene de la Intendencia de Salto se ha intensificado la tarea de control de alimentos y productos que debido al calor pueden sufrir alteraciones y se exponen igualmente a la venta. Si bien se considera que es la población quién debe chequear la fecha de envasado y vencimiento de cada producto que adquiere, pueden surgir alteraciones en el proceso desde la producción y llegada al consumidor final que pueden generar cambios en el alimento. La cadena de frío es una de ellas. Por lo general en verano y fundamentalmente en días de temperaturas muy altas, los productos lácteos, cárnicos y embutidos pueden sufrir alteraciones si no tienen una refrigeración exigente. En el caso de la leche fresca, en la reciente ola de calor, su durabilidad era de uno a dos días máximos, luego ya no estaba apta para consumo.
SE HAN DETECTADO INFRACCINES
Si bien desde Bromatología se actúan en base a denuncias, los inspectores de sanidad hacen una recorrida para detectar alguna anomalía en la venta de productos, fundamentalmente en la feria y puestos de calle. Se han detectado algunas infracciones y se han hecho las observaciones pertinentes a la cadena de frío. La cadena de frío de los alimentos es importante porque: Garantiza la inocuidad de los alimentos, Evita problemas de salud, Preserva los productos perecederos, Cumple con las normas de higiene. Las etapas de la cadena de frío son: pre-enfriamiento, almacenamiento en frío, transporte refrigerado, almacenamiento intermedio y entrega al cliente final.