El informe de la Unidad Agroalimentaria Metropolitana (UAM) da a conocer que la oferta de duraznos se ha visto comprometida por problemas en el almacenamiento en frío, generando un alza en los precios de las partidas de reciente cosecha y de variedades tardías.
Según el reporte, el deterioro por enfriamiento de las frutas conservadas ha obligado a los productores a apostar por productos que aseguren calidad, lo que afecta tanto a los mayoresistas como al consumidor final, y se manifiesta en un contexto de presión en el mercado local.
El informe detalla que, en el mercado mayorista, los precios varían según el calibre y categoría del fruto. Los duraznos de calibre grande se comercializan entre 70 y 100 pesos, mientras que los de calibre mediano alcanzan entre 50 y 70 pesos. Por otro lado, los duraznos extragrandes se sitúan en una franja de 110 a 120 pesos, y los de calibre chico se venden entre 40 y 50 pesos.
En el caso del durazno blanco, los productos de calibre grande se transan entre 120 y 150 pesos y los medianos entre 80 y 100 pesos, todos con impuestos incluidos.
