El mercado de carne ovina registró un notable incremento en los precios de exportación durante la última semana cerrada el 15 de marzo, alcanzando un valor promedio preliminar de US$ 6.126 por tonelada, un salto significativo respecto a los US$ 4.728 de la semana anterior. En los últimos 30 días móviles, el precio de exportación se situó en US$ 4.716, mientras que en lo que va del año promedia US$ 5.173 por tonelada, un 38% por encima de los US$ 3.763 registrados en el mismo período de 2024.
Pese a la recuperación de los precios, el volumen exportado de carne ovina mostró una fuerte caída en la primera quincena de marzo. Israel se consolidó como el principal destino de las exportaciones con 97 toneladas enviadas, seguido por China con 74 toneladas, aunque este último presentó una disminución en comparación con el año pasado. La volatilidad en los envíos y la menor presencia de algunos compradores han generado fluctuaciones en el mercado, aunque la tendencia de precios al alza podría favorecer a los exportadores en los próximos meses.
En el caso de la carne bovina, el precio de exportación se mantuvo firme, con un Ingreso Medio de Exportaciones de US$ 4.634 por tonelada en la semana finalizada el 15 de marzo, según datos preliminares del Instituto Nacional de Carnes (INAC). En los últimos 30 días móviles, el precio alcanzó US$ 4.782, mientras que en el acumulado anual promedia US$ 4.712, lo que representa un crecimiento del 16% en comparación con los US$ 4.054 de comienzos de 2024. El volumen exportado se mantiene estable en 103.267 toneladas, prácticamente idéntico al del año anterior.
El destino de la carne bovina exportada ha cambiado significativamente en los primeros meses de 2025. Estados Unidos se consolidó como el principal comprador con el 42% de la participación total, desplazando a China, que redujo su cuota al 30%. En la primera quincena de marzo, las exportaciones a EE.UU. crecieron un 79% interanual, alcanzando 5.503 toneladas frente a las 3.076 de 2024. En contraste, los envíos a China cayeron un 57%, pasando de 10.020 toneladas a 4.264 en el mismo período. Estos cambios reflejan un reacomodamiento en la demanda internacional, con una creciente presencia de América del Norte y un repliegue del gigante asiático.
