jueves 29 de mayo, 2025
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Ramón Soto fue designado por el MSP como referente nacional de la ruralidad

El Dr. Ramón Soto, fue designado por el Ministerio de Salud Pública como referente nacional para las Ruralidades. La decisión, tomada por la ministra Cristina Lustemberg, lo coloca en un rol clave para tender puentes entre las políticas sanitarias nacionales y las realidades del interior profundo. Soto reside y ejerce desde hace más de 30 años en Valentín, una localidad del interior de Salto. Su trayectoria lo ha vinculado de forma directa con los desafíos sanitarios del medio rural y con la Sociedad de Medicina Rural del Uruguay. Desde esa experiencia asumirá un papel estratégico: representar, articular y dar visibilidad a las necesidades de los equipos de salud rural.
DESIGUALDADES
“El rol es direccional”, explicó. “Es decir, tratar de aterrizar las políticas sanitarias que imparte la ministra en los territorios rurales y, a su vez, llevar las inquietudes de las inequidades territoriales que existen a nivel del país”, para ver “qué soluciones se les pueden ir brindando”, puntualizó. Para Soto, las desigualdades entre las zonas urbanas y rurales son evidentes y persistentes. “A nadie se le escapa la brecha que existe entre lo rural y las capitales en general, pero mucho más con Montevideo”, sostuvo. Aunque han existido estrategias en distintos gobiernos, reconoce que “esas estrategias no han cristalizado, por ejemplo, en mitigar la migración permanente o mejorar la calidad asistencial”.
PLANIFICAR EL RECURSO HUMANO
Entre los desafíos centrales identificados por el referente, el primero es el fortalecimiento del recurso humano en salud. “No se planificó determinada característica o perfil de recurso humano para las zonas rurales, que sí debe tener ciertas actitudes, ciertas inquietudes y ciertas aptitudes”, señaló. Estas condiciones específicas deberían contemplarse incluso desde la etapa de formación universitaria. “Yo creo que el eje fundamental son los recursos humanos”, insistió, y enfatizó la necesidad de contar con remuneraciones acordes para todo el equipo. “Si los médicos rurales están postergados, el personal de enfermería está mucho más fragilizado. La mayoría son mujeres, comprometidas con la asistencia, pero cuando logran competencias, se las lleva la ciudad”, observó.