Por Carlos Silva
El 10 de julio marcará un antes y un después en la historia reciente de nuestro departamento. Ese día, Carlos Albisu asumirá como nuevo Intendente de Salto, dando inicio a una etapa que muchos soñamos y que hoy, con la fuerza de la confianza popular, se vuelve realidad. No se trata solo de un cambio de autoridades. Se trata de recuperar la esperanza, de volver a creer que Salto puede más. Que Salto merece más.
Durante años fuimos testigos de cómo se apagaba lentamente el orgullo de ser salteños. De cómo nuestra ciudad, que alguna vez fue ejemplo en el interior del país, se veía atrapada en el estancamiento, en la desidia y en la falta de rumbo. Pero también fuimos muchos los que no nos resignamos. Los que, con trabajo y compromiso, recorrimos cada barrio, cada rincón del departamento, hablando con la gente, escuchando, proponiendo. Convencidos de que había otro camino. Un camino de responsabilidad, de cercanía, de gestión eficiente.
Carlos Albisu llega a la Intendencia con ese respaldo. Con una historia de compromiso, de esfuerzo, y con un equipo preparado técnica y humanamente para asumir el desafío que significa gobernar Salto. Un equipo que integra a hombres y mujeres de distintos sectores políticos, unidos por un mismo objetivo: devolverle a nuestro departamento el lugar que se merece.
A lo largo de estos 15 años de trabajo junto a Carlos Albisu, fuimos sembrando un proyecto político basado en la responsabilidad, en el diálogo, y en la búsqueda constante de soluciones. La creación de la Lista 50, allá por 2010, no fue un hecho aislado. Fue la construcción de una herramienta política que nació para transformar la realidad, para ser parte del cambio que la gente reclamaba.
Y hoy, ese proceso llega a un momento clave. Con la fuerza de la Coalición Republicana, que reúne a distintos partidos con una visión común de futuro, comenzamos a escribir una nueva página en la historia de Salto. Porque entendemos que no hay transformaciones posibles sin unidad, sin generosidad, sin pensar primero en la gente.
Este nuevo tiempo no será fácil. Gobernar es tomar decisiones, asumir costos, enfrentar obstáculos. Pero también es construir, abrir puertas, generar oportunidades. Y eso es lo que vamos a hacer desde el primer día. Sabemos que hay mucho por hacer: mejorar los servicios básicos, ordenar la gestión, cuidar el ambiente, atraer inversión, generar empleo, fomentar el desarrollo turístico, acompañar al productor rural, al emprendedor, al comerciante, al trabajador.
Nuestro compromiso es gobernar con los ojos puestos en el futuro, pero con los pies firmes en la realidad. No prometemos milagros, pero sí garantizamos trabajo, transparencia, cercanía y sensibilidad. Porque cada problema tiene un rostro, y detrás de cada reclamo hay una historia, una familia, una necesidad real.
Mañana, cuando Carlos Albisu asuma como Intendente, estaremos dando un paso firme hacia ese cambio. Con emoción, con humildad, y con el compromiso de no fallarle a la gente. Salto tiene todo para ser una ciudad pujante, moderna, inclusiva. Y juntos lo vamos a lograr. Con planificación, con vocación de servicio, con honestidad y sentido común.
Por eso, con la misma energía del primer día, y con la misma convicción con la que comenzamos este camino, afirmamos: mañana Salto comienza a cambiar.
