Mariano Casola confirmó su asunción como encargado de Termas del Arapey y delineó un panorama complejo marcado por la falta de recursos y herramientas, mientras se ultiman los detalles para la privatización del hotel municipal, que podría estar operativo para carnaval.
DETERIORO GENERALIZADO
El flamante encargado no eludió la difícil realidad heredada. «El deterioro y hasta por momentos la desidia en todos los rubros departamentales… hay muy pocas herramientas para trabajar», describió Casola sobre la situación que encontró al asumir. La carencia abarca desde maquinaria básica como retroexcavadoras hasta equipamiento para el mantenimiento del parque termal. «Para el corte de los pastos mismos, del mantenimiento del parque termal, la verdad que con pocas condiciones», explicó el funcionario. Esta situación se agrava por un presupuesto insuficiente que complica el funcionamiento normal del centro termal. Casola reconoció que los recursos son escasos pero confía en que el nuevo presupuesto departamental permitirá «tener mayor infraestructura para trabajar, mayor maquinaria, mayor herramientas para mantener el parque termal».
HOTEL MUNICIPAL
La privatización del hotel municipal ya superó la instancia legislativa. «Eso ya lo aprobó la junta por mayoría fueron de todos los partidos que lo votaron, salvo uno», confirmó Casola. El proceso ahora aguarda el visto bueno del Tribunal de Cuentas para la firma definitiva. El encargado destacó que la adjudicación recayó en «gente que tiene experiencia… la gente de Altos del Arapey, operadores con conocimiento del sector hotelero y termal. No es que le entregamos el hotel a cualquiera que se presentó, sino gente que conoce las termas, conoce el rubro hotelero», subrayó.
REACTIVACIÓN ECONÓMICA
La reapertura del hotel municipal promete un efecto dinamizador para todo el complejo termal. Casola explicó que funcionará con media pensión —solo desayuno—, lo que obligará a los huéspedes a consumir en los comercios locales para almorzar, merendar y cenar. «Va a ser una buena oportunidad para que todo el centro termal trabaje mejor, que los comercios tengan mayor movimiento», proyectó el encargado. Esta reactivación llega tras años difíciles para los comerciantes locales, que «han resistido la pandemia, han resistido momentos muy malos en cuanto a concurrencia».
PARQUE ACUÁTICO
Entre las novedades figura la construcción de un parque acuático dentro del propio hotel municipal, contemplado en el pliego licitatorio. «Un parque acuático también va a estar dentro del hotel municipal, así que también va a ser un atractivo más», confirmó Casola. El funcionario estimó que las obras podrían completarse en seis a ocho meses, con posibilidad de inauguración para carnaval. Mientras tanto, se enfoca en «acondicionar y recuperar lo básico… tener prolijo el parque termal que es lo que la gente también extraña y nos reclama». La combinación de infraestructura renovada, gestión privada especializada y nuevos atractivos busca devolver a las Termas del Arapey el movimiento turístico que «supieron tener en algún momento».
