Desde el año 2012 a 2023 se realizaron más de 100.000 abortos en el país y solo un 6% continuó el embarazo

Por Andrés Torterola
Según datos oficiales del Ministerio de Salud Pública (MSP), desde la implementación de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) en 2012 hasta diciembre de 2023, se han registrado más de 100.000 procedimientos de aborto en Uruguay. Solo el 6 % de las mujeres que consultaron por IVE decidieron continuar con el embarazo. Asimismo, en 2023, año en que se realizó el último censo, Uruguay registró la tasa de natalidad más baja desde 1900. En una entrevista concedida a CAMBIO, integrantes del grupo Pro Vida y Familia de Salto afirmaron que existen diversas formas de alcanzar el poder, entre ellas, mediante el engaño y la anulación de la capacidad crítica de la sociedad.
SE PIERDE UNA VIDA
El grupo señaló que, cuando el objetivo es anular a un ser humano, se recurre a discursos y acciones que generan confusión, contradicciones y dudas profundas, incluso sobre nuestra propia existencia y esencia. Según sus declaraciones, esta estrategia se está utilizando como medio para alcanzar el poder, empleando herramientas como la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) y la ideología de género, entre otras. Que un médico insinúe, desde un principio, que con el aborto no se pierde una vida, representa una contradicción, especialmente si se trata de un ginecólogo. Su labor fundamental es proteger la vida desde el momento de la concepción, acompañando y apoyando a la madre en una etapa tan importante y especial para ella.
DAÑAR LO MÁS VALIOSO
Confundir a una mujer embarazada al plantearle dudas sobre la decisión de tener a su hijo, quien ya se está desarrollando con todos los cambios hormonales, fisiológicos y emocionales que ella experimenta desde el inicio, es una forma de dañar lo más valioso de su ser: su dignidad. Permitirle la opción de decidir no tener a su hijo contradice su propia naturaleza, destruye su autoestima y la hace más vulnerable y desdichada, señalaron. Afirmar que la Ley del Aborto genera «felicidad pública» supera los límites de lo humanamente lógico y racional. Esto evidencia un intento de moldear una sociedad anulada, que no piensa ni siente. Es de conocimiento común que la verdadera felicidad proviene de tener una familia y que traer un niño al mundo es una de las mayores fuentes de dicha, incluso en los contextos más críticos y desafiantes.
¿FUENTE DE FELICIDAD?
Las secuelas postaborto están científicamente comprobadas, tanto en mujeres como en hombres. Muchos de los problemas de salud mental que han aumentado en los últimos años, como la depresión, los ataques de pánico, el insomnio, la ansiedad y las ideas suicidas, son consecuencia de estas experiencias. ¡Somos seres humanos desde el momento de la concepción, y nuestro primer derecho es el derecho a la vida! Toda vida es sagrada. ¡No debemos permitir que nos engañen ni que nos causen daño! Indicaron.