lunes 28 de abril, 2025
  • 8 am

El puntero y una excelente muestra de contundencia

Edicto Matrimonio

Progreso superó 2-0 a El Tanque en un partido muy discreto y continúa como el único puntero de la divisional “B”.
El comienzo del encuentro fue de vuelo muy bajo. Los equipos brindaron un trámite monótono y cerrado, en el cual sobraron faltas e interrupciones, pero escasearon las situaciones de gol.
En este contexto, en el cual Progreso pareció comenzar mejor, pero se diluyó rápidamente, El Tanque tuvo -aunque concebida de forma desprolija- la única situación más o menos peligrosa de su primer tiempo, con una definición sutil pero inefectiva de Galeano.
Sin embargo, una vez superado ese tramo del cotejo, ambos bandos volvieron a la tónica habitual del primer tiempo, con prolijidad táctica y aplicación para defender, pero muchos inconvenientes en la faceta de creación de juego.
Así, cuando la primera parte se despedía sin dominador claro, y con imprecisiones por doquier, Progreso alcanzó la ventaja a través de su fórmula predilecta, la pelota quieta, ya que un cabezazo certero de Silva fue lo que abrió el marcador justo antes del descanso.
Esta inmerecida ventaja le otorgó a los de la ruta la posibilidad de administrar las acciones del segundo tiempo con una actitud diferente. En el complemento, el elenco de Varesi lució muy concentrado y sólido, calzándose el overol y cerrándole todos los espacios posibles al conjunto rival.
Por su parte, los del Burton se mostraron incómodos con la idea de tomar la iniciativa, puesto que no supieron nunca cómo romper el cerrojo defensivo propuesto por Progreso, careciendo de argumentos futbolísticos y consagrándose como un equipo inexpresivo.
Por si fuera poco, en el 90+4′, cuando los de Cardozo se adelantaban con más corazón que juego, la banda roja alcanzaría el segundo tanto en un contragolpe culminado por Ángelo Sagradini, decretando así una importante victoria que no se correspondió con su producción ofensiva, pero que mostró a las claras su poder de contundencia.
Lautaro Rocha