sábado 2 de agosto, 2025
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Coaching sostiene que hay que sacar la política partidaria del tránsito para evitar el “amiguismo” y abusos de poder

Avisos judiaciales

Por Melisa Ferradini.
El Coaching Ontológico Víctor Pacín, en diálogo con CAMBIO reflexionó sobre la seguridad vial en Salto y en nuestro país. Habló de la falta de educación, los riesgos, las políticas equivocadas, la actitud de los conductores y el rol de los Inspectores de tránsito.
PANDEMIA O EPIDEMIA
“Estamos viviendo una epidemia, sin duda”, nos dice. La entrevista comienza con tono de preocupación: “Fijate lo que ha pasado estos últimos 15 días. Parece que no terminara más. Salen en el diario continuamente muertes y accidentes”. Pacín considera que hay una administración nueva en la Dirección de Tránsito de la Intendencia de Salto y que hay que darle la oportunidad de hacer las cosas mejor. Pero detecta un error de base: “Confunden causas con factores. Están tratando de explicarle a la gente las normas, pero hay que explicar otras cosas. La norma es fácil de entender, pero el problema es que la gente no tiene dimensión del riesgo”. Recuerda que hace 15 años ya se trabajaba en liceos, CAIF y escuelas con programas amplios de seguridad vial y lamenta que muchos hayan sido abandonados. “Se desactivó la escuelita de tránsito”, recuerda.
EDUCACIÓN Y COMPROMISO
El Coaching apunta a un cambio profundo de paradigma: “Hay un problema de valores. Vos podés conocer todas las leyes a la perfección, pero si no las cumplís, de nada te sirve. Hay que explicarle a la gente el riesgo que conlleva no respetar la norma”. Cuenta el caso de una mujer atropellada por un auto que se dio a la fuga. “Eso es un problema de valores. Lo mínimo que podés hacer, tengas o no la responsabilidad, es parar y ayudar. Pero se fue. Eso sucede continuamente”. Agrega: “Hay que enseñarle a la gente que el otro también se puede equivocar. Y hay que sancionar. En Estados Unidos, sin libreta no existís. Sabés que no podés tomar alcohol, que la cebra es sagrada. Hay una pena, un tribunal de faltas, un juez especializado”, señaló.
CORRUPCIÓN, PODER Y DOBLE VARA
Pacín no elude la corrupción, ni el abuso de poder: “Lo primero que hacen cuando les ponés una multa es levantar el teléfono. “Llamo a fulanito que es amigo de menganito, a ver si se la pueden sacar’. Eso es parte del problema. Los políticos no tienen que manejar la seguridad vial. Tiene que haber técnicos. Valora la labor de los inspectores, aunque reconoce que son blanco de agresiones: “Hay una falta de respeto total. Los insultan, los tratan como ogros. Pero si están en esa esquina, es parte de una estrategia. Tiene que haber un mapa de riesgo, un estudio del flujo de vehículos y saber a qué hora se producen más choques”.
CINTURON DE SEGURIDAD
“La gente no usa el cinturón. Y eso que los autos nuevos te hacen sonar la alarma. Pero le bajan el volumen. Tenemos un parque automotriz muy viejo. Los cinturones ya no cumplen su función. Y hay autos en la calle que yo no sé cómo están habilitados”. Los conductores mayores cruzan el puente de Daymán y recién ahí se ponen el cinturón”. Y concluye: “Tenemos que sacar la política del tránsito. No la política pública, sino la política partidaria”.