Por Karina De Mattos.
Sobre las nueve de la mañana de ayer se comenzaron a congregar en Plaza Artigas donde se organizó la marcha con separación prudencial entre los sindicalistas y se solicitó la utilización de tapabocas. Sobre las 10 comenzaron a marchar calle Uruguay abajo con batucada y fuegos artificiales, carteles y pasacalles. Al llegar a calle Zorrilla de San Martín la marcha dobló y tomó calles Brasil hasta la puerta de la sede departamental del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, allí se dió lectura de la proclama, la misma estuvo a cargo de la presidente del PIT.CNT Romina Espinosa.
PROCLAMA
La temática principal fue la objeción ante la votación de la Ley de Urgente Consideración: “La Ley de Urgente Consideración, conocida como LUC, que ha propuesto el Poder Ejecutivo y que está siendo considerada para su votación en el Parlamento, nada tiene que ver con la emergencia nacional, ni en forma ni en contenido. En nuestro país más de 200.000 trabajadores han sido enviados al seguro de paro en los últimos meses y muchos han sido despedidos de su trabajo. Pese a las mejoras todavía hay en Uruguay más de 400.000 trabajadores que no están registrados a la seguridad social. Los trabajadores informales: feriantes, artistas, trabajadores en régimen de monotributistas, son quienes más están sufriendo la crisis, con la caída total o parcial de sus ingresos y la desprotección social a la que se enfrentan. Los niños con sus vínculos sociales relativamente debilitados por efecto de la interrupción de las clases. Los jubilados, probablemente se hayan sentido más solos que en tiempos normales por efecto de la distancia personal que implicó la pandemia. Los pequeños y medianos empresarios, que viven de su trabajo hacia la demanda interna y que objetivamente sus intereses están mucho más cerca de la clase trabajadora que de la gran riqueza acumulada, ven paralizadas sus actividades. En fin, una crisis sanitaria, económica y social, de nuevo tipo, que requiere respuestas de nuevo tipo”.
INTERSOCIAL
“Nosotros, los trabajadores sindicalizados nucleados en el PIT CNT, defendemos un Estado de Bienestar con base en el diálogo social (fiscal, social y productivo) que incluya la universalización de acceso a los derechos, ingreso básico universal y un sistema de cuidados.
Este movimiento obrero ha actuado con responsabilidad en este proceso. Nuestra primera reivindicación ante la pandemia fue el seguro de enfermedad profesional para las trabajadoras y trabajadores de la salud. Hemos acompañado las políticas sanitarias del Poder ejecutivo. Nuestros valores han sido en la práctica, la responsabilidad y la solidaridad. Cuán mayores serían las consecuencias de la crisis sí de manera solidaria el movimiento popular no hubiera contribuido con más de 500 ollas populares en las que se han alimentado 100.000 compatriotas, 200.000 kilos de alimentos en canastas, distribuidas a lo largo y a lo ancho de todo el país. El movimiento popular construye una red de solidaridad. Dentro de la intersocial construimos una plataforma que refleja el planteo del campo popular. Nuestra primer y principal propuesta, un ingreso básico de emergencia, obtuvo la negativa del gobierno. Esta propuesta plantea asegurar que todos los hogares cuenten al menos con un salario mínimo nacional en este contexto. Profesionales de la Universidad de la República y nuestro Instituto Cuesta Duarte lo promueven por ser una medida posible de implementar ya que implicaría 0,25% del PIB aplicarlo por un mes. Otras propuestas ampliamente difundida por la Intersocial son el control de precios, la delimitación una canasta de servicios básicos de emergencia y la suspensión y aplazamiento de desalojos y juicios ejecutivos”.
