
Mejor gestión
Sobre el tema mejora en la gestión, Requena indicó que «en el sector agroexportador hay más de una decena de tasas y contribuciones que se le imponen al productor, directa o indirectamente, y que históricamente han sido afectadas para cubrir presupuestos distintos a los que estaban destinados en deterioro de la propia institucionalidad agropecuaria».
En este sentido recordó que durante el 2021, el Estado recaudó «U$S 133 millones de dólares únicamente en concepto de tasas y contribuciones del agronegocio», valor que consideró «equivalente a los aranceles que el Uruguay paga por las exportaciones totales a China».
Para Valdés Requena «es mucho el dinero que el agronegocio aporta al Estado uruguayo en tasas y contribuciones específicos».
El presidente de ARU indicó que el proyecto de ley de Rendición de Cuentas «ha sido gravemente modificado por la Cámara de Diputados, estableciendo reasignaciones de recursos con afectaciones específicas», lo que consideró ha sido motivado por «resultados político-electorales y en perjuicio de la actividad económica nacional».
«Estas modificaciones debilitan al Instituto Nacional de Colonización, derivando recursos a la Universidad de la República. Lo mismo sucede con los recursos del Laboratorio Tecnológico del Uruguay, creando un impuesto a las exportaciones no tradicionales» dijo Requena quién agregó estar de acuerdo a que el país «apueste por la ciencia, la tecnología, la innovación o la formación de su gente. Tampoco nos oponemos a que esos proyectos o programas deban ser subsidiados, si las políticas sociales así lo demandan», sin embargo fue enfático al señalar que «subsidios cruzados, como el subsidio al transporte de pasajeros, deben provenir de Rentas Generales y no deben cargarse sobre la producción, afectando la competitividad de todo el país en una clara violación de las normas tributarias».
Sobre el impuesto incorporado por la Cámara de Diputados, sobre «la exportación de animales en pie, carnes, menudencias y subproductos, con destino a Rentas Generales», el gremialista dijo que «aplicar un impuesto a las exportaciones de productos agroindustriales desincentiva a la producción; reduce las inversiones; reduce el empleo, principalmente en la industria. Esta medida tiene exactamente el efecto contrario al buscado».
En este sentido indicó «conocemos muy bien la realidad de países vecinos aplicando retenciones» y remarcó que «es un camino que no queremos, ni debemos recorrer, por el bien de Uruguay».
La medida anunciada por la intendencia de Paysandú de cobrar un precio por el uso de la caminería rural, también encontró un rechazo categórico de la gremial. Según dijo Valdés Requena, la comuna sanducera «recibe entre transferencias del gobierno central y el impuesto del 1%, recaudado directamente de los productores, unos US$ 2 millones. Exigimos se rindan cuentas de ello».
Poder Ejecutivo y período de gobierno
En este tema reconoció la apuesta y los avances del gobierno en las «negociaciones de acuerdos comerciales con otros países. Turquía, Acuerdo Transpacífico, la habilitación de exportación de sorgo a China, así como el inicio de negociaciones por un Tratado de Libre Comercio con el mismo país».
Al mismo tiempo recordó que «al gobierno le quedan 30 meses» por lo que sostuvo que desde la gremial se cree que «que no son tiempos de iniciar una campaña electoral mirando al 2024, son tiempos de apostar a la unidad y el diálogo. Por supuesto que habrá diferencias, pero deben ser planteadas desde un clima de respeto y tolerancia».
En este sentido indicó que «los conflictos permanentes en la industria láctea no han tomado en consideración los impactos negativos que provocan, no solo en los productores tamberos, sino también en toda la sociedad provocando desabastecimiento del mercado interno». Valdés Requena dijo que «trabajadores, empresarios y políticos debemos trabajar juntos, hombro con hombro, con decisión, para llevar adelante las transformaciones que el país necesita y reclama con urgencia».
«Necesitamos avanzar hacia una profunda reforma del Estado, que garantice un Estado eficiente y austero, con funcionarios estrictamente necesarios y capacitados técnicamente para ocupar los cargos que ejerzan. Debemos lograr un Estado ágil, profesionalizado, digitalizado al 100% de expedientes y trámites, buscando la eficiencia de la gestión pública, logrando la ejecución de sus programas y procesos de contratación» dijo el presidente de ARU.
Desde la visión de la gremial «no todo el sistema político pareciera estar dispuesto a asumir la responsabilidad del ahora. Piensan más en los costos político-electorales de sus decisiones, que en las consecuencias de no hacer lo debido»
Situación del sector
«El sector agropecuario atravesó durante el último año un muy buen momento referido a precios y volúmenes exportados» reconoció el productor, quien agregó «asumimos la responsabilidad como productores de trabajar e invertir en busca de un aumento de nuestra propia productividad generando más divisas, pero fundamentalmente creando más empleos en forma directa e indirecta».
«El 80% de los ingresos por exportaciones de bienes son de origen agropecuario. Seguir en este camino implica invertir en tecnologías, especialmente en la cría y recría, resultando necesario la mejora en genética, sanidad y manejo en los suelos de menor capacidad forrajera» dijo.
Si bien reconoció el buen momento que ha atravesado el sector, dijo que «se equivocan» quienes dicen que el agro tiene «un huracán de cola». En este sentido explicó que los productos generados por el sector agropecuario, «entre junio y agosto de este año cayeron a los valores promedios desde el año 2000, los costos de insumos que enfrenta el sector son muy desafiantes».
«El tipo de cambio sigue comprometiendo la actividad» y en este sentido discrepó con el gobierno ante una devaluación del dólar que «rondó el 10%, acumulado a la inflación a agosto de 9,3%, prácticamente tenemos una inflación en dólares del 17%. Una pérdida del poder de compra de esta envergadura compromete al agro sin lugar a duda».
Recaudación
«La recaudación bruta a julio de 2022 ha sido la mayor de la historia» dijo Valdés Requena. «No podemos repetir lo ocurrido a partir del 2006. Alcanza con recordar la evolución del déficit fiscal desde ese año 2006, llegando al máximo en el 2019, una escalada sin precedentes que llegó al 4,9% de la mano de la creación de más de 60.000 empleos públicos al 2019, no puede pasar lo mismo, apelamos a una mejor gestión de los recursos y que el interés general prime sobre lo político».
Este planteo de la mejor gestión de los recursos, va más allá del gobierno nacional, el presidente de ARU apuntó también a los gobiernos departamentales, que «tomen medidas dando prioridad a la gestión y no a costos políticos electorales».
Cierre
El presidente de la gremial, Dr. Gonzalo Valdés Requena, al cerrar su exposición, dijo que Uruguay está «en condiciones de alcanzar los mercados, más allá de cualquier condicionamiento. Para ello debemos contar con el apoyo de quienes toman las decisiones», por lo que remarcó que «por el bien del país, no podemos perder más tiempo, ni oportunidades. El tiempo es ahora».